Junto al Abarth 124 Spider, la firma del escorpión presentó en el Salón de Ginebra el primer acercamiento a su futura versión de carreras. El Abart 124 rally volverá, tras 40 años desde su última carrera, en el Rally de Montecarlo de 1976, a la competición para probar en condiciones extremas las soluciones técnicas que luego la marca en sus productos de calle.
Sin duda, Carlo Abarth estaría orgulloso de sus pupilos, viendo hasta donde han llevado al Mazda MX-5, desarrollado conjuntamente con Fiat. Bajo el capó se oculta el motor de 1800 cc de doble árbol de levas, con turbo e inyección directa, que puede llegar a rendir 300 CV a a 6.500 revoluciones, con una curva de par, según dice la marca para que el piloto goce en cada curva y derrape. En su desarrollo, dicen desde Abarth «se ha pensado para asegurar fiabilidad y prestaciones en las condiciones extremas de los rallies: hielo, tierra, polvo, agua y altas temperaturas».
Este propulsor se ha asociado a un cambio secuencial de seis marchas que se puede accionar mediante levas de accionamiento. Como no podía ser de otro modo, este Abarth 124 Rally (cuyas reservas para participar en la temporada 2017 de la categoría FIA R-GT) cuenta con un diferencial autoblocante mecánico para garantizar la motricidad de este tracción trasera.
Se ha trabajado mucho (junto LM Gianetti) también en suspensiones: cuadrilátero deformable delantero y el multilink trasero tienen rótulas metálicas para la máxima precisión de conducción y mayor desplazamiento, para hacer frente a distintos tipos de superficie. EXT SHOX ha aportado su conocimiento con amortiguadores regulables en 4 posiciones, novedad absoluta en un vehículo de rally.
El propulsor, al igual que los coches de los que deriva, se ha montado detrás del eje delantero. Y, si ya destacan los Mazda MX-5 2015 y Fiat 124 Spider por su ligereza, esta versión Abarth, aún más. Para el habitáculo y el compartimento del motor se han empleado materiales ligeros y resistentes mientras que la capota se ha sustituido por un hard top fijo de un material compuesto. Así la distribución de pesos tiende hacia el eje trasero… y se consigue bajar el centro de gravedad aún más, según asegura el fabricante.
No creas que se ha dejado la seguridad al margen. Para poder homologarlo en la categoría FIA R-GT (algo descafeinada por el momento, ya que los Porsche 911 GT3 se pasean) el chasis incorpora una jaula de seguridad y el habitáculo también se ha ideado para que los elementos no den problemas.
Y ya que hablamos del interior, como puedes ver, se ha tapizado en Alcantara, desde el salpicadero a los asientos, para reducir el peso del vehículo y reflejos en el habitáculo, además de mejorar el agarre de los asientos y el volante, básico en la competición.
La vuelta de Abarth a la competición no podía olvidar ciertos guiños al pasado. Desde la decoración del automóvil, lo más visible, a detalles como el códido del proyecto: SE139. Por un lado SE significa Sports y Experimental, «una relación directa con los valores Abarth de producción artesana y progreso técnico» y el número 139 recuerda que, a lo largo de 67 años de historia, Abarth ha desarrollado en media dos proyectos de carreras anuales.
Entre los patrocinadores, han contado con la firma de lubricantes Petronas Selenia, que ha contribuido al desarrollo del motor; el grupo Adler Pelzer, que ha producido componentes a medida o Michelin, creador de los neumáticos que se montan en unas llantas de carreras OZ. Por supuesto, no faltan empresas italianas como Sabelt, que porporciona los asientos envolventes, cinturones y otros dispositivos de seguridad, o Kappa, que viste a todo el equipo Abarth.
Fuente: Abarth
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