Estamos en momentos de cambio en el sector automotriz, en plena época de transición hacia la electrificación. Al menos en Europa, la normativa es tan estricta que obliga a los fabricantes a centrarse en esta tecnología de «cero emisiones». Eso también genera un efecto dominó que está empujando a los usuarios a comprar este tipo de coches. Sin embargo, no todo el mundo tiene clara la decisión si está preparada para tener un eléctrico. Ha quedado demostrado al ver que son los coches híbridos los que están a punto de desbancar a los de gasolina.
Analizando las ventas dentro de la Unión Europea se han podido ver una serie de detalles que llaman mucho la atención. Probablemente lo más destacado fuera que los híbridos coparon el 30,9 % de las ventas, quedando muy cerca de los coches de gasolina, que son los más populares con el 33,3 %. Todavía vemos que un tercio de las ventas van para esta modalidad más tradicional, mientras que el diésel ha ido a la baja y apenas supone el 11,9 % de las ventas. La clave es que la categoría de los híbridos, que también incluyen los MHEV, ha crecido un 20,9 %.
Lógicamente, los de gasolina vienen de caer un 4,8 % y se espera que en 2025 sean superados por los electrificados. Otra de las claves que se ha visto en el estudio de ACEA (Asociación Europea de Fabricantes de Automóviles) es que los vehículos enchufables están a la baja. A pesar de las necesidades de llegar a un sector totalmente electrificado, sus ventas han caído en nuestro continente de forma considerable. Se vendieron un 5,9 % menos de eléctricos que en 2023 y los híbridos enchufables cayeron un 6,8 %. Y eso que las ventas totales en Europa subieron ligeramente y se colocaron en los 10,6 millones de coches.
Actualmente, vemos que los eléctricos representan un 13,6 % del total de las ventas. Por su parte, los híbridos enchufables se quedan en un 7,1 % y parece que no terminan de despegar. Eso significa que todavía hay una gran parte de la población que no está dispuesta a pasar al enchufe, pues casi el 80 % de las ventas no lo tienen. También habría que comentar la polémica de meter a los microhíbridos en el mismo saco que los híbridos, algo que hace que sean los vencedores de este estudio.
Todos sabemos que es la jugada maestra que se han sacado los fabricantes de la manga. Con un sistema eléctrico de 48V que apenas sirve como apoyo al bloque de gasolina, estos coches tienen ventajas como la etiqueta ECO en nuestro país. Para la mayoría de la población es algo que tiene sentido, ya que no se encarecen mucho más que los de combustión tradicional y tienen los beneficios de un híbrido. Todavía está por ver si cambia la normativa en este aspecto, pero por el momento tiene mucho peso en las ventas.
Fuente: ACEA