La semana pasada analizamos en profundidad las ventas de coches en 2014. Fue un año muy bueno, impulsado por el PIVE, en el que todos los meses superaron los registros del año anterior hasta alcanzar un aumento de las ventas de un 18,4% y se superaron las 850.000 unidades.
También estudiamos esta misma semana cómo se habían comportando las ventas de coches usados en 2014. Por cada coche nuevo se vendieron dos de segunda mano. La proporción baja un poco respecto a años anteriores, lo que es una buena noticia, ya que de este modo el vetusto parque móvil español (ver datos de 2013) puede ir rejuveneciendo poco a poco.
¿Qué pasará este año? No cabe duda de que el mercado español todavía tiene potencial de crecimiento porque hay una demanda retenida importante. De hecho, las previsiones para 2015 apuntan a una mejora del mercado. Un crecimiento económico, unido a la reforma del IRPF (que permitirá algo más de renta disponible en los hogares), más el Plan PIVE 7, más los esfuerzos comerciales de las marcas y concesionarios deberían hacer que en 2015 el mercado superase al año 2014, hacia el millón de unidades.
Esta optimista previsión no es nuestra. Es lo que creen desde Aniacam, en boca de su presidente, Germán López Madrid, (también presidente de Volvo Cars en España). Para lograr alcanzar esa cifra, también solicita medidas, como que el Gobierno reduzca de 10 a ocho los años que debe tener un automóvil para acogerse a las ayudas de los Planes PIVE. De este modo podría acelerarse la renovación del parque de automóviles español, cuya edad media se sitúa ya en los 13 años.
En la propuesta se incluye también que puedan beneficiarse de las ayudas los coches usados de hasta cinco años. Esta es una vieja reivindicación de Aniacam, en tiempos del Plan Prever, logró que fueran incluidos los seminuevos. Sin embargo, en estos momentos parece más difícil su inclusión. Y es que en el Prever, las ayudas provenían sólo del Estado, mientras que en el Pive, de los 2.000 euros, 1.000 los pone la marca y el resto la Administración.
El presidente de Aniacam también propone que, en los usados, la ayuda sea de la mitad. Sinceramente, no entendemos esta propuesta. ¿Por qué querría una marca primar con 500 euros el cambio de un coche viejo por uno usado, antes que por uno nuevo? Todos los fabricantes cuentan con departamentos de vehículos de ocasión, pero no es comprensible este movimiento.
Las diferentes patronales del sector ya apuntaron que el mercado necesitará de estímulos en este 2015. Están confirmados los fondos del Plan PIVE 7, de 175 millones de euros, que no durarán (si se sigue el ritmo de años anteriores) más que para unos meses. En su opinión, podrán caminar solos, sin ayudas, en 2016, siempre y cuando las previsiones económicas se mantengan. Mientras tanto, si en 2015 quieren superarse las 900.000 unidades, hay que seguir animando a las ventas con subvenciones. El mercado de coches usados se mantendrá en la misma proporción de dos a uno con respecto al de nuevos, que se corresponde con la media europea.
Si pensamos e el medio plazo, se mantendrá el predominio de las ventas a particulares, que pasarán del 56% del total que suponen hoy, al 58%. Pero desde Aniacam no creen que lleguen a superar el 60% que marcaban de la crisis. Sí se espera un crecimiento entre las ventas a flotas, que pasarán del 24% al 26%, incluyendo en ellas las ventas en rénting, que ya suponen el 12% del total. Bajarán, según sus previsiones, las compras de compañías de alquiler, que ahora representan el 20% y que deberían bajar al 16%.
Fuente: Aniacam