El pasado curso estuvo marcado por el surgimiento de nuevas formas de movilidad. Y uno de los medios de transporte que más protagonismo adquirió fue el patinete eléctrico, no sólo por su aparición masiva en las grandes ciudades, sino también por los conflictos y la controversia que le han acompañado.
A finales del pasado año, los patinetes fueron retirados de ciudades como Madrid por falta de regulación. Pues ahora la DGT trabaja en una normativa que formará parte de un Real Decreto que sacará adelante el Gobierno en los próximos meses. Se prohibirá el uso de patinetes eléctricos en carreteras y vías interurbanas.
Pero lo primero que hará la Dirección General de Tráfico será definir los vehículos de movilidad personal cómo aquellos “de una o más ruedas dotados de una única plaza y propulsados exclusivamente por motores eléctricos, que puedan proporcionar al vehículo una velocidad máxima por diseño comprendida entre 6 y 25 km/h”. Gracias a esta definición, se podrá limitar o restringir el uso de este tipo de transporte en aceras, espacios reservados para peatones…
Los vehículos de movilidad personal no están considerados vehículos a motor. Los patinetes eléctricos son los más populares, pero no los únicos, ya que también hay segways, monociclos eléctricos y hoverboards entre muchos otros.
No sólo entrarán en vigor normas relacionadas con el tipo de vía en el que se pueden utilizar, sino que también lo harán normativas relacionadas con la velocidad. Y es que la DGT quiere limitar la velocidad máxima de los patinetes eléctricos a 25 km/h. Del mismo modo, traficó pretende exigir un permiso de circulación, que será distinto al de automóviles y motocicletas.
El mencionado permiso de circulación podría ir acompañado, en función de los ayuntamientos, de otras normas cómo el uso del casco o la contratación de algún tipo de seguro de responsabilidad civil.
Todo esto parece que será otro impedimento para el uso del patinete eléctrico, pero a la vez parece algo necesario para su correcto funcionamiento.
Fuente: Servimedia