Aunque la conducción autónoma no termina de despegar, la mayoría de fabricantes siguen investigando al respecto y trabajando en proyectos piloto. El último de Volkswagen acaba de arrancar en Austin, Texas (Estados Unidos), que es uno de los pocos sitios donde es legal hacer pruebas en carretera abierta. Han dispuesto una flota formada por diez unidades de Volkswagen ID. Buzz que han sido altamente modificadas para conseguir esa conducción autónoma y están rodando para ver la viabilidad de su empleo a nivel comercial.
Han comenzado con apenas una decena de vehículos, pero la idea es que en los próximos tres años se siga desarrollando este proyecto y que se sumen más vehículos autónomos. El objetivo es no sólo quedarse en Austin, sino también expandirse a cuatro ciudades estadounidenses más (Belmont y California, entre ellas). El lanzamiento comercial de vehículos autónomos, ya sin conductor, está planificado para el año 2026. La tecnología ha sido desarrollada con la ayuda de Mobileye, empresa especialista que lleva tiempo trabajando con Volkswagen para crear estos vehículos.
Lo cierto es que el Volkswagen ID. Buzz es el vehículo ideal para este tipo de pruebas por varios motivos. Es el monovolumen eléctrico más adecuado para el transporte de pasajeros, que será la tarea que tenga que desempeñar en el futuro cuando esté probada y lista la tecnología. Será una flota de robotaxis más que estará disponible que esos estados (Texas y Arizona) donde es legal que operen. Volkswagen también va a empezar a emplear a algunos miembros del equipo que trabajaron con Argo AI.
Todo con la finalidad de ofrecer flotas autónomas para otras empresas, porque Volkswagen no está creando un servicio exclusivo de transporte compartido o de solicitud de viajes. También quiere explotar otras vías de colaboración con otras empresas y aplicaciones. Mientras tanto, están probando, validando y refinando la tecnología; recopilar millones de datos de este proyecto piloto. Aunque tienen las cámaras, radar y tecnología LIDAR necesarios para conducir por sí mismos, estos vehículos también llevan a bordo un conductor humano por seguridad.
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