Hace ya casi cuatro años que conocimos el proyecto Bloodhound SCC, un vehículo más cercano a un cohete espacial que a cualquier coche rápido que hayas conocido. La idea era convertirlo en el vehículo terrestre más rápido. El actual récord de velocidad es de 1.228 km/h y data 1997 y el objetivo del Bloodhound SCC es alcanzar (agárrense a sus asientos) 1.609 km/h
Ahora el piloto Andy Green nos muestra el interior del Bloodhound SSC, una cabina futurista realizada con 13 capas de dos tipos de resina y cinco tipos de fibra de carbono, además de aluminio… pero que en su punto más grueso la cabina mide sólo 25 mm de espesor. El volante es de titanio y los velocímetros son analógicos de la marca Rolex, para evitar problemas de interferencia y malos cálculos de un velocímetro digital.
Como podrás ver en el vídeo a continuación,se trata de un interior bastante sencillo, sin alardes de ningún tipo. La mayor preocupación para mantener al conductor informado de las condiciones del vehículo. La pantalla central del bólido informa de la velocidad en millas por hora y el número de Mach que rebasa, mientras que la pantalla de la izquierda muestra las presiones hidráulicas y la temperatura de los sistemas de frenos. Por su parte, la pantalla de la derecha proporciona información acerca de los tres motores con los que cuenta el coche.
En el vídeo podrás ver a Andy Green mostrando algunos detalles fascinantes de «su» Bloodhound SSC, como el volante o los trabajos de impresión en 3D en titanio. Si tienes ganas de ver más, los periodistas de The Telegraph han creado una imagen interactiva a través de la cual puedes visitar la cabina de controles del Bloodhound SSC a tu gusto.
Después de producirse varios retrasos, se espera que sea en 2015 cuando se realice el intento del récord. Ese sí que será un documento audiovisual excepcional, ver a un vehículo terrestre moverse a la friolera de 447.04 metros por segundo. Por ahora, te dejamos con su interior.
Fuente: Bloodhound SCC