Cuando los anuncios no dejaban de martillear nuestros cerebros con la idea de que «algo está cambiando en Mercedes» no imaginábamos que podían llegar tan lejos. Cierto que siempre han sido un referente creando nichos de mercado. Ahí están los sport tourers como la Clase B y la Clase R para demostrarlo. Y nos ha sorprendido la vuelta de tuerca que le han dado el Mercedes Clase A, sobre todo con el Clase A 45 AMG que está llamado a convertirse en el referente de los comapctos deportivos premium.
Pero ninguno de ellos nos ha sorprendido tanto como este derivado del Mercedes Clase G que Daimler ha mostrado a unos pocos elegidos en Dubai esta semana. Su nombre, G63 AMG 6×6 y se trata, en resumen, de un AMG G63 alargado y con seis ruedas, en tres ejes. Mecánicamente, monta el V8 biturbo de 5.5 litros y 536 CV de potencia, con un par de 760 Nm y asociado a una transmisión 7G-Tronic
Tremendo motor se antoja necesario para mover 3.774 kg que pesa el Mercedes G 63 AMG 6X6. Y resulta escalofriante imaginar cómo esa mole se pone a 100 km/h desde parado en menos de siete segundos. El consumo es alto, desde luego, 18 litros/100 km, pero no tan elevado como cabría esperar de un «tanque» de semejante tamaño. La velocidad máxima se ha limitado electrónicamente a 160 km/h, la más baja de toda la gama AMG con mucha diferencia.
Cuarenta por ciento del par se envía al eje central, mientras que el frontal y el eje trasero reciben cada uno un 30 por ciento. La presión de los neumáticos, que van montados en unas impresionantes llantas de 36 pulgadas, se puede ajustar con un compresor de aire incorporado, ago muy útil cuando se conduce en terrenos diferentes (tiene una altura libre al suelo de 460 mm y más de un metro de capacidad de vadeo). Su capacidad de carga es de 650 kg.
El G63 AMG 6×6 se deriva de una edición especial del Clase F desarrollado por las fuerzas armadas de Australia, pero a diferencia de ese vehículo , este prototipo está equipado con todas las opciones de lujo imaginable. La consola central está equipada con fibra de carbono en un débil esfuerzo para contrarrestar el excesivo peso de 6×6, y los asientos y la tapicería de la puerta están acabados en cuero acolchado.
Este prototipo es más largo, más ancho y más alto que un Chevrolet Suburban (por citar un coche con medidas superlativas) y con neumáticos todo terreno, cinco diferenciales de bloqueo y esa enorme distancia al suelo, el 6×6 AMG G63 está predestinado para hacer frente a cualquier tipo de terreno, siempre y cuando dicho terreno es suficientemente grande para que quepa, claro.
Daimler ha construido dos unidades de esta increíble máquina (una en blanco y otra en color gris mate). Todavía son prototipos, pero sí se espera que una pequeña serie llegue a la línea de producción. Y ojo, que Mercedes aún puede guardarse un as en la manga si quiere seguir sorprendiéndonos. Porque aún podrían montar el propulsor de seis litros V12 biturbo del soberbio G 65 AMG, que alcanza los 612 CV. ¡Desde coches.com les animamos a hacerlo!
En este vídeo puedes ver al «montruo» en movimiento»:
Fuentes: Mercedes, Car&Driver