Poco te podemos contar más del Porsche 959. En su día lo calificamos como «el regalo que Porsche hizo a la innovación del automóvil»… y releyéndolo ahora hasta nos hemos podido quedar cortos. Y es que se trataba de un coche rapidísimo en cualquier circunstancia, sobre asfalto o fuera de él (fue ganador del Dakar en 1986.. ¡un superdeportivo!). En Estados Unidos fue todavía más legendario, ya que fue ilegal imporarlo hasta 1999, año en que pudo empezar a circular… ¡Gracias a Bill Gates!
Recapitulemos. Durante el desarrollo del modelo de Porsche se negó a proporcionar el Departamento de Transporte de los Estados Unidos cuatro unidades del Porsche 959, que necesitaban para pasar las pruebas de choque, imprescindibles para tener la homologación que le permitía circular. Y así fue hasta que surgió una ley a medida para él, la Show and Display de 1999 Al parecer, el dueño de Microsoft, Bill Gates, decidió hacerse con uno, así que presionó junto a otros potentados para que aquel coche, una auténtica muestra tecnológica sobre ruedas, pudiese circular por las carreteras americanas.
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El primero de los superdeportivos modernos contaba con una larga lista de características, entonces inéditas o muy extrañas, como sistema de tracción activa a las cuatro ruedas, los primeros sensores de presión de neumáticos de la historia (montaba 235/45 delante y 255/40 detrás) y hasta llantas de magnesio con radios huecos. Unido a la carrocería monocasco hecha de aluminio, fibra de carbono y Kevlar, el resultado fue un coche muy ligero que, movido por un motor bóxer que rendía 450 CV, podía superar los 320 km/h.
Esta unidad que ves en las imágenes fue modificada para poder circular legalmente en Estados Unidos antes de que la ley Show and Display fuese aprobada. Vendido originalmente al conocido coleccionista japonés Yoshiho Matsuda, para ser uno de los reyes de su vasto museo, lo vendió a Tony Hart, que inmediatamente lo envió a Canepa Design en California (uno de los mejores especialistas de la marca en el mundo, como puedes ver con este trabajo).
El Porsche 959 sufrió una modernización completa para cumplir con las normas vigentes en ese momento Estados Unidos. Fue un proyecto de 5 años que costó nada menos que 180.000 dólares de la época. Incluyó la sustitución de la suspensión original por amortiguadores de gas y resortes de titanio (lo que ahorró aún más de peso), y se modificó el motor con nuevos turbocompresores que proporcionaban impulso total desde las 1.500 rpm. El sistema de gestión del motor Motronic también se actualizó para cumplir con estrictas normas de emisiones de California.
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Las mejoras mecánicas producen un rendimiento impresionante. El motor ahora entrega 583 CV y casi 680 Nm de par. Así, no es de extrañar que realice el 0 a 100 km/h en apenas 3,2 segundos y alcance una velocidad máxima en torno a los 346 km/h.
Si hoy hemos recordado este vehículo es porque el coche se ofrece ahora a la venta en la subasta Quail Lodge, el día 14 de agosto de 2015. Su valor estimado es de entre 1.000.000 y 1.250.000 dólares… así que si dispones de ellos, no tienes más que hacer click algo más abajo y pujar.
Fuente: Bonhams