La electrificación llega a todos los campos y eso también incluye al segmento de los vehículos comerciales. Stellantis es uno de sus principales impulsores, pues ya tiene una completa gama de versiones eléctricas de varios modelos en todas sus marcas. Y lo cierto es que no se olvida de los ejemplares que haya vendido anteriormente. Ahora proponen alargar la vida de los comerciales diésel con una electrificación de fábrica en un proyecto que podría ser interesante. Una especie de restomod que solamente afectaría al sistema de propulsión.
No hay que engañarnos, los comerciales son vehículos tradicionalmente diésel debido a las largas distancias que tienen que recorrer día a día. Sin embargo, el futuro que le espera a este combustible es bastante negro y parece que la próxima década todo tendrá que estar electrificado. Así que aquellos que hayan comprado hace unos años todavía podrán disfrutar de sus monturas con esta conversión hecha por el propio fabricante que comenzará con las Peugeot Expert, el Citroën Jumpy y el Opel Vivaro.
Lo cierto es que si se pueden convertir a eléctrico esos modelos, el abanico queda bastante abierto. Porque todos estos modelos están asentados sobre la plataforma EMP2 del grupo que también da vida a ejemplares de otros tamaños de carrocería y de otras marcas (véase Fiat y Toyota). El caso es que el propio Xavier Peugeot dijo estar trabajando en este proyecto, para que las pequeñas empresas no tengan que comprar un vehículo nuevo y puedan aprovechar los actuales durante más tiempo.
Se habla de una conversión de diésel a eléctrico por menos de 20.000 euros, aunque todavía está en fase de desarrollo. Comenzará en Francia, con la posibilidad de que los usuarios puedan aprovechar los incentivos de su gobierno. Podrían cubrir el 40% del coste de conversión hasta un máximo de 10.000 euros, siempre y cuando el usuario vaya a conservar la furgoneta eléctrica más de un año o que la conduzca al menos 6.000 kilómetros antes de venderla.
Estará disponible para aquellos modelos que lleven el motor diésel de cuatro cilindros BlueHDi de 2.0 litros, que será sustituido por el bloque eléctrico de 136 CV que está presente en muchos de Stellantis. También se sumará una batería de 50 o de 75 kWh para ofrecer autonomías que irán desde los 244 hasta los 350 kilómetros. Está claro que con el diésel podrían hacer muchos más, pero también su recorrido en el tiempo será menor en muchas zonas debido a las prohibiciones.
Fuente: Automotive News