Hace unos meses conocíamos a los nuevos BMW X6 M y BMW X5 M, auténticos deportivos en un traje de SUV, que ocultan bajo su motor un propulsor V8 de 4.400 cc con tecnología M TwinPower Turbo que rinde 575 CV de potencia y entrega 750 Nm de par, disponibles desde las 2.200 hasta las 5.000 vueltas.
Una auténtica salvajada, una oda al exceso que pudimos ver en circuito. Pero, como hay gente para todo… ¿qué pasa si uno quiere algo más? Y decimos quiere, porque la necesidad no creemos que entre en esta ecuación. En la presentación del BMW X6 ya nos habían hablado de algunas extravagancias que los clientes de este modelo solicitan a BMW Exclusive… pero quienes busquen personalización y exclusividad con toque deportivo, entonces recurren a los accesorios M Performance para los X5 M y X6 M.
Ya habíamos conocido los accesorios M Performance para el X6 «normal» (como el de nuestra prueba), pero en estas versiones lucen más todavía. Destacan los riñones delanteros en color negro brillante, como las branquilas laterales. También están disponibles las carcasas de los espejos retrovisores en fibra de carbono, que la marca nos cuenta que se han fabricado a mano.
En los laterales vemos las franjas laterales con el tri-color de BMW M, que también asoman en las entradas de aire delanteras y en el paragolpes posterior. En el caso del X6 M, el difusor que rodea las cuatro salidas de escape también puede estar acabado en negro brillante.
El interior destaca por los accesorios en carbono y alcántara. Desde la molduras del salpicadero, a las que rodean la palanca de cambios, pasando por las de la parte superior de las puertas.
Quien lo desee (y pueda pagarlo) podrá pedir las molduras que se sitúan en los umbrales de las puertas, que tienen retroiluminación, con las letras M Performance. El volante puede ir completamente forrado en alcántara, con las costuras tri-color a juego con las franjas exteriores, con la cinta de color azul en la parte superior marca la posición cero.
Fuente: BMW
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