El Bentley S2 Continental es una auténtica rareza dentro del mundo del automóvil. Apenas se hicieron cuatro unidades de este ejemplar que destacaba por su nivel de lujo y por sus prestaciones. Se movía mediante un motor de gasolina V8 de 6.2 litros que fue de los más destacado de finales de los 50. Ahora una de esas unidades se ha convertido en el clásico más raro que se haya transformado a eléctrico en un proceso totalmente artesanal y muy llamativo para mejorar muchos aspectos.
Lunaz Design ha sido el encargado de hacer esta llamativa reconversión. La empresa británica no es ajena a este tipo de trabajos, pues ya ha hecho trabajos parecidos con un Aston Martin DB6, con un Range Rover clásico e incluso con otro Bentley, el S3 Continental Flying Spur. Se trata de una especie de restomod, una restauración con modificaciones para dejarlo actualizado. En este caso, lo más interesante es el sistema de propulsión eléctrico que mejora el rendimiento del original.
Este Bentley S2 Continental desarrolla 405 CV y 719 Nm de par, por lo que es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 6,9 segundos. De hecho, han tenido que hacer modificaciones adicionales para afrontar el aumento de potencia. Eso se traduce en la incorporación de una nueva suspensión de resorte helicoidal con amortiguadores ajustables o de un sistema de frenado más capaz (pinzas de seis pistones delante y cuatro detrás) con regeneración de energía. No se dan detalles de la batería, pero aseguran que todos sus componentes son de proveedores europeos de primer nivel .
La unidad sobre la que se basa fue fabricada en 1961 y, aunque iba a ser un cuatro puertas, finalmente su propietario encargó al carrocero londinense James Young un cuerpo de dos puertas. En los años siguientes fue cambiando de manos hasta llegar a este proceso de restauración actual. Para llevarlo a cabo, los técnicos de Lunaz Design utilizan el técnicas pioneras como el escaneo 3D para crear modelos detallados de diseño asistido por computadora (CAD). De esta forma, la carrocería queda como nueva y todos sus componentes internos son renovados.
Eso también se aplica al interior de este Bentley S2 Continental, que se viste de materiales sostenibles para adaptarse a los tiempos que corren. La tapicería es de pieles curtidas con hojas de olivo caídas naturalmente, mientras que las alfombrillas está hecha de fibra de nylon reciclada. También se acredita que todas las molduras de madera que aparecen en salpicadero y otras zonas proceden de fuentes sostenibles.
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