Si por algo ha destacado Abarth desde su fundación en 1949, es por su deportividad. Tuvo un nacimiento dentro de la competición que ganó popularidad con las preparaciones para Fiat, hasta llegar al punto que fue adquirida por esta marca en 1971. Eso se traduce en que estuvo bajo el paraguas de FCA y ahora de Stellantis, por lo que ha tenido que adaptarse a las necesidades de este conglomerado. Primero con el lanzamiento de modelos eléctricos y ahora parece que con la despedida del motor de combustión para siempre.
Muchos podrían considerar una herejía este hecho, que por el momento tendrá lugar en Europa. En la región con las normativas más estrictas ya llevamos tiempo sin ver los Abarth 595 y 695 en los configuradores oficiales de la marca. Parece que estas versiones de gasolina fueron retiradas del mercado en el mes de agosto y que no hay intención de devolverlas a la vida. A partir de ahora, se centrarán en la electrificación total, presente a través de su 500e y también del recién llegado: Abarth 600e.
Así lo ha confirmado recientemente Gaetano Thorel, responsable de Fiat y Abarth en Europa, que dejaba claro que no tienen sentido que haya sucesores para los modelos de gasolina. Afirmaba que los costes son demasiado altos para ellos y también para el consumidor. Ponía el ejemplo de Italia, donde se paga un impuesto de circulación elevado (entre 1.000 y 2.000 euros) para un modelo que emita 180 g/km. Además, hacía referencia a que los nuevos eléctricos igualan el nivel de disfrute y también el rendimiento, por no hablar de que los precios ya son similares.
Una opción intermedia sería hacer modelos de Abarth con el sistema microhíbrido que van a introducir en el Fiat 500 Ibrida y que viene de otros modelos de Stellantis. Sin embargo, no sería compatible con el nivel de potencia que buscan en la marca y con las sensaciones al volante. Tampoco tienen la capacidad de separarse de Fiat y hacer modelos propios como Alpine respecto a Renault. Parece que seguirán fieles al ADN de los últimos años y que la única posibilidad de ampliar la familia para por el futuro SUV de Fiat, que será un hermano mayor del Panda.
Fuente: Autocar