Aunque Mercedes tiene otras prioridades por encima de los todoterrenos, siempre ha demostrado que se le dan bien este tipo de vehículos. Lo lleva haciendo más de cuatro décadas con el mítico Clase G y también ha querido experimentar en una línea más extrema con modelos como el G500 4×4² o el prototipo Clase E All Terrain 4×4². En la línea del anterior, ahora vuelve a aparecer un concept sorprendente: el Mercedes EQC 4×4².
Como su propio nombre indica, se trata de una transformación del SUV eléctrico en un todoterreno con capacidades extremas. Es poco habitual ver un coche de cero emisiones con esta perspectiva, pero parece que en el futuro podrían verse ejemplares así de producción. Lo primero ha sido adaptar su chasis para conseguir 293 mm de altura libre al suelo, que es más del doble de los 140 mm que tiene el EQC de serie. Eso también hace que mejoren todas sus cotas.
Además de mejorar esa medida respecto a un Clase G, el Mercedes EQC 4×4² también consigue una profundidad de vadeo de 400 mm, un ángulo de ataque de 31,8º, un ángulo de salida de 33º y uno ventral de 24,2º. Por si fuera poco se equipan unos neumáticos de medida 285/50 R 20 y corte todoterreno para que no tengan problema en ningún tipo de superficie. Cuenta con los programas de conducción Off-Road tomados del GLC, aunque con una puesta a punto específica para el eléctrico.
Otro punto destacado de este prototipo es que ofrece una experiencia sonora diferenciada. Es muy importante la interacción del coche con el conductor y por eso emite sonidos para hacerle saber la disponibilidad de los sistemas, sobre el aparcamiento o sobre la propia conducción en función del uso del acelerador o de la velocidad. Por fuera también será reconocido gracias a un generador de sonido externo que emplea los faros delanteros como altavoces, optimizando el espacio disponible. Aunque no queda claro que el coche vaya a llegar a producción, ese detalle sí que podría hacerlo en otros modelos.
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