En muchas ocasiones se habla de buques insignia sin apenas conciencia de lo que significa. Pero, sin duda, el Range Rover es uno de esos vehículos singulares, que ha creado tras de sí una completa gama dentro de la marca. Y si alguien no tiene suficiente lujo y capacidades, ahí está el departamento de vehículos especiales para crear unidades como este Range Rover SV Carmel Edition.
Presentado en la Monterey Car Week, un escenario más que propicio para este tipo de coches de lujo, solamente se fabricarán 17 unidades de este modelo, por un precio de 345.000 dólares. Parte de los beneficios se destinarán al Santuario Marino Nacional de la Bahía de Monterey.
Un coche así solamente podría moverse con el motor más exclusivo de la gama. El Range Rover SV Carmel Edition cuenta bajo el capó con el V8 biturbo de 4.4 litros con 530 CV (390 kW) y 749 Nm de par. Se asocia a la transmisión automática de ocho velocidades que envía su potencia a las cuatro ruedas, como siempre ha sido en la historia del Range Rover.
¿Y qué hace especial a este modelo? Sin duda, su exquisito cuidado por el detalle. La carrocería va pintada en un bronce satinado que no encontrarás en el configurador, con unas llantas de 23 pulgadas torneadas con detalles en ese mismo color. Desde las puertas cuenta se ilumina el suelo, con un diseño de SV Bespoke, cuando el
El interior de un Range Rover es siempre un espectáculo. Cuando el vehículo lleva la firma de SV son aún más sorprendentes las combinaciones. En el interior del Range Rover SV Carmel Edition, por ejempl, mezclan asientos delanteros Liberty Blue con unos traseros Caraway Beige en contraste, con bordado Carmel Edition. Los separa una consola central que atraviesa el coche por completo y doonde se ubica una mesa Club con accionamiento eléctrico.
Ademas hay otros detalles, como los umbrales de las puertas específicos, portavasos desplegables eléctricamente o el frigorífico integrado con cristalería Dartington Crystal grabada con las siglas SV. También hay detalles que agradecerá el conductor, como los controles de cerámica en blanco, con un mosaico en relieve que anuncia un tacto exquisito… y también en el maletero, donde se guardan dos juegos de palos de golf de Titleist personalizados para la ocasión.
Fuente: Land Rover
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