Cuando probamos el Land Rover Defender nos pareció uno de los SUV (no cuenta con chasis de largeros y travesaños ya) más capaces para defenderse fuera del asfalto, sino el que más. Pero criticamos que ya no era una herramienta de trabajo, sino más bien un Discovery más capaz.
¿Llegarán esas versiones más espartanas? Pues parece que al contrario, o al menos esas noticias llegan desde Inglaterra. Y es que parece que se está planteando un Defender por encima del 130 de siete plazas (y el de ocho), más lujoso y claro, más grande. Es algo que está pendiente de aprobación y, de conseguirse, podría compartir su plataforma y algunos componentes mecánicos con el próximo Range Rover que esperamos ver en 2022.
Es razonable suponer que se creará una «línea» Defender, dentro de la gama del fabricante, al igual que existen vínculos estilísticos entre el Range Rover Evoque, el Range Rover o el Range Rover Velar.
Eso sí, esas supuestas similitudes solo serán superficiales pues el nuevo modelo de lujo podría basarse en la plataforma MLA que inaugurará el Range Rover de quinta generación. Eso permitiría hacer un Defender aún más grande (como dicen que se pretende) y a la vez incorporar un alto grado de electrificación como demanda Europa. Desde versiones híbridas suaves a híbridas enchufables y eléctricas.
Hace tiempo se hablaba también de un crossover del Defender, con un enfoque más de asfalto, como el vetusto Freelander. Esa idea parece haberse descartado, algo que podemos entender porque el comportamiento en carretera del Defender actual es soberbio:
De todos modos tocaría esperar a 2025 para conocer ese Defender derivado del futuro Range Rover. Por ahora no hay confirmación oficial por parte de la marca, que no suelta prenda de los próximos pasos de la gama Defender.
Vía: Autocar