A nadie le gustó cuando Mercedes instauró un claro downsizing en su gama más deportiva. Y no consistía en hacer bloques más pequeños y refinados, su opción era instalar motores de menos cilindros en modelos de larga tradición. Por ejemplo, el Mercedes-AMG C 63 pasaba de tener un flamante V8 a un cuatro cilindros con sistema híbrido enchufable. Lo mismo le pasaba el Mercedes-AMG E 53 con sus seis cilindros en línea, que será el que alimente al nuevo modelo. El caso es que Mercedes-AMG va a recuperar los V8 en estos modelos que ya los llevaban antes.
Podríamos estar ante uno de los casos más flagrantes de revocar una decisión que no ha funcionado bien en este sector. Lo habitual es que los fabricantes se mantengan firmes y no rectifiquen a no ser que sea estrictamente necesario, al menos en estas decisiones que conllevan eliminar motores grandes de sus gamas. Sin embargo, parece que Mercedes retomará el uso de su V8 biturbo de 4.0 litros (M177) en las versiones más deportivas de sus Clase C y Clase E a partir de 2026. Aunque eso será después de que cumpla una serie de requisitos.
El motivo para que el Mercedes-AMG E 63 S 4Matic+ Final Edition fuera anunciado el año pasado como el último modelo que llevaba el motor V8 era por la estricta normativa de emisiones. Así que la marca de la estrella se ha puesto manos a la obra para que esta mecánica pueda cumplir con la Euro 7, algo que les obligará a utilizar electrificación a la hora de montarlo en los coches. Los dos ejemplos principales ya los tenemos en el mercado y serían el Mercedes-AMG GT 63 SE Performance y el Mercedes-AMG S 63 E Performance.
En esos casos hemos visto que se ha despedido por completo al V12 para pasar al V8 electrificado, pero aún así es mejor que ese cuatro cilindros híbrido enchufable que chirría en la gama de Mercedes AMG. Si en los modelos grandes se ronda los 800 CV, parece que para los Clase C y Clase E se pondría un nivel de potencial más cabal, en torno a los 600 CV. No estaría mal teniendo en cuenta que algunos rivales también están a esa altura. En BMW, el M3 mantiene los seis cilindros en línea, mientras que el próximo M5 podría llevar V8 electrificado. En Audi, parece que se optará por un V6 electrificado para los futuros deportivos.
Fuente: Car and Driver