Todos recordamos la época dorada de Mitsubishi en competición. También cuando Ralliart ayudaba a la firma japonesa con sus modelos de calle para lograr un carácter deportivo sin precedentes. Sentimos decir que esos días no volverán y que es prácticamente imposible ver ejemplares como el Lancer Evo. Ahora lo más aproximado sería algo así como el Mitsubishi Colt Performance. Se trata de una creación de la división checa de la marca que busca una dosis de deportividad, pero que deja algo fría en la parte del rendimiento.
El actual Mitsubishi Colt comparte plataforma con el Renault Clio debido a que ambas marcas forman parte de una alianza. Es la forma más inteligente de que los japoneses tengan producto adecuado para Europa sin hacer una gran inversión, pero también les limita. Tanto es así, que cuando el equipo de República Checa se ha puesto a hacer una versión deportiva apenas han podido hacer modificaciones importantes. La decoración con la firma Performance le ayuda a ganar presencia a nivel estético, con una librea formada por los colores blanco, rojo y negro que son los históricos de la marca.
En el exterior del Mitsubishi Colt Performance lo más importante serían las llantas OZ Racing Superturismo GT de 18 pulgadas que pegan con esos faldones extendidos o con un splitter en rojo diferenciador. Del interior no se han mostrado imágenes, pero es de esperar que se cambien algunas molduras o que se opte por una tapicería que vaya a juego con el exterior. En cuanto a la parte mecánica, se puede apreciar que utiliza el mismo motor de tres cilindros y 1.0 litro que tiene cualquier otro Colt de la gama. El bloque turbo va ligado a una caja de cambios manual de seis velocidades.
Lo importante es que recibe algunas modificaciones para llegar hasta los 129 CV y 222 Nm de par. Lo han confirmado en el banco de pruebas y ofrece una curva de potencia más interesante que el de 90 CV del que parte en la versión 100T que se vende en nuestro país. Sin embargo, ese incremento en su potencia no le otorga el Performance que lleva en su nombre. En el caso de llegar a España ni siquiera sería el tope de gama, pues no hay que olvidar que hay un híbrido que llega hasta los 145 CV gracias al motor de 1.6 litros y dos mecánica eléctricas.
No se han mencionado mejoras a nivel de chasis en este Mitsubishi Colt Performance ni nada más. No se moverá mal debido a un peso de 1.097 kg, pero no parece estar a la altura del público más exigente en términos de deportividad. Todavía no ha quedado clara cómo será la producción de este ejemplar. Al ser un proyecto nacido en República Checa es de esperar que se haga de forma limitada en dicho mercado.
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