El Porsche Macan probablemente fuera uno de los lanzamientos más importantes del pasado año. Se trataba de un cambio radical del modelo, que abandonaba los motores de combustión para dar un salto a lo eléctrico. La segunda generación se limitada a este tipo de tecnología para conseguir que la marca alemana pudiera conseguir el objetivo de alcanzar un 80 % de ventas eléctricas de cara a 2030. Sin embargo, ahora se están planteando retomar la combustión en este modelo después de la decepción tras su lanzamiento.
El Macan era el segundo modelo exclusivamente eléctrico de Porsche tras el Taycan. Estaba llamado a triunfar por su planteamiento, pues se trata de un SUV de un tamaño más contenido y un precio dentro de lo esperado, partiendo de 82.310 euros en nuestro país. Tras más de medio año en el mercado, lo cierto es que no ha ayudado demasiado a las ventas de Porsche a nivel mundial, que registraron un descenso del 7 %. Estos resultados les han llevado a plantearse recuperar la gasolina en su modelo de acceso.
Es cierto que la culpa de la caída en ventas no es del Macan. Es más responsable el Taycan, que vendió un 50 % menos y dejó claro que se ha estancado el interés por los eléctricos. Ya se ha reducido su producción para ajustarse a la demanda y mientras se buscan soluciones alternativas. En Porsche, los motores de combustión siguen siendo un pilar importante, pues siguen vendiendo deportivos de corte más purista. Ahora van con pies de plomo y se ceñirán a la demanda de los clientes, incluso meterán algo de combustión o niveles inferiores de electrificación en futuros modelos.
Con esto se abren las posibilidades a la llegada de un Porsche Macan de gasolina que pudiera reforzar las ventas. También a paralizar el proyecto de los 718 totalmente eléctricos, que podrían mantener también la combustión a pesar de los planes iniciales de desecharla. La realidad es que el Macan vendió alrededor de 500.000 unidades en sus diez primeros años en el mercado, cuando todavía había versiones de combustión. Es posible hacer nuevas versiones de este tipo gracias a la plataforma Premium de combustión que también porta el Audi Q5, pero todavía está por ver.
Fuente: Autocar