BYD no para. Y parece que atiende a lo que decimos. ¿Por qué lo decimos? Porque probamos el BYD Seal y después el BYD Seal U y este último nos gustó mucho… si bien con una conducción al confort mientras el primero era más animado, con versiones de propulsión y tracción total. Usando esa misma base técnica llega ahora el BYD SeaLion 7 que hemos probado por primera vez.
Se trata del séptimo modelo 100 % eléctrico de la marca que llega al mercado español (al que habría que añadir un híbrido enchufable). Es también el cuarto de la serie Ocean, tras los dos mencionados y el BYD Dolphin.
La marca nos cuenta que “combina prestaciones de deportivo, un elegante diseño SUV, una vanguardista tecnología de propulsión eléctrica, un habitáculo espacioso con unos acabados de elevado nivel, una interfaz más inteligente y la seguridad”. Con unos precios de partida desde 39.780 euros la versión básica, que se elevan a 46.180 euros en el tope de gama Excellence.
Hablamos, como siempre de precios recomendados por la marca. Puedes encontrar ofertas del BYD SeaLion 7 en la sección de coches nuevos, publicados por concesionarios oficiales de la marca en toda España. Contamos también con herramientas para financiar el coche… pero antes analicemos a fondo el BYD Sealion 7.
Exterior
Creados sobre la misma plataforma, también continua con el lenguaje de diseño de la serie Ocean, en particular de la berlina media Seal, llevándola a las formas de un SUV coupé a este modelo que busca animar las ventas de la marca de cara a 2025.
En la parte frontal sigue con la forma de X que unen las grandes aperturas laterales que, además de cumplir una función aerodinámica canalizando aire hacia las ruedas, buscan imitar el movimiento de las olas. En la parte superior destacan los faros LED flotantes Dual U y el capó.
Con una longitud total de 4.830 mm (de los que 2.930 mm corresponden a la distancia entre ejes) tiene una forma alejada de la de un todoterreno, sino de un sedán algo más elevado (160 mm más que el Seal), con la parte frontal baja, formas suaves y una línea de techo que cae de manera muy delicada. Entre las bondades aerodinámicas, los tiradores de las puertas que quedan enrasados con la carrocería cuando el coche se pone en movimiento.
Creado en el estudio de diseño de BYD en Shenzhen bajo la dirección del Director de Diseño Global de la compañía, Wolfgang Egger, destaca la zaga, con un espectacular alerón trasero dividido.
Interior
En el habitáculo el gran protagonista es la tecnología, con una pantalla de 15,6 pulgadas dominando el salpicadero, que puede colocarse en horizontal y vertical. Estrena interfaz que apuesta por iconos en lugar de menús con una lista de funciones. Cuando probemos el coche más detenidamente nos detendremos más en este apartado, sobre todo el nuevo control por voz que divide el coche en cuatro zonas y sabe quién lo ordena.
Notable, eso sí, la mejora en la compatibilidad con Android Auto y Apple CarPlay, ya integrados en la interfaz de BYD, así como el equipo de sonido del especialista danés Dynaudio, con doce altavoces. Cuenta con una base de carga inalámbrica para dos móviles, algo poco habitual.
Acompaña a esta pantalla un cuadro de instrumentos digital de 10,25 pulgadas, con mucha información disponible pero quizá mal estructurada ya que cuesta ver algún dato. Me gustó el Head-Up Display de la versión Excellence AWD que llevaba, pues muestra datos de manera ordenada (incluido el funcionamiento de las ayudas a la conducción.
La calidad del interior es bastante superior a la que puedes encontrar en un Tesla Model Y, uno de sus principales rivales, sobre todo en la versión Excellence, con asientos en cuero napa.
La distancia entre ejes (10 mm más que el BYD Seal) permite un amplio espacio detrás. Como emplea la batería Blade Battery el piso no queda tan elevado como en otros SUV eléctricos, además de permitir un piso totalmente plano. Hay buen espacio tanto para las piernas como para la cabeza y podrían ir tres, si bien el del centro no cuenta con un asiento tan cómodo como los laterales.
Maletero
El maletero del BYD Sealion 7 anuncia 520 litros de capacidad, una cifra correcta para su tamaño. Además, puede ampliarse a 1.758 abatiendo los respaldos de los asientos traseros.
Como es habitual en vehículos eléctricos, bajo el capó delantero hay un hueco que suma 58 litros más. Es muy amplio, además de los cables de carga podría caber una maleta de cabina de avión en un apuro.
Motor
Hay varias versiones para elegir el Sealion 7. La básica Comfort tiene un motor trasero de 313 CV (230 kW) de potencia y 380 Nm de par, con el que acelera de 0 a 100 km/h en 6,7 segundos y alcanza 215 km/h de velocidad máxima.
Las versiones Design AWD y Excellence AWD suman un motor de 217 CV (160 kW) de potencia en el eje delantero para tener tracción total. La potencia total es de 530 CV (390 kW) con 690 Nm de par y apenas precisa 4,5 segundos para alcanzar 100 km/h desde parado (con la misma punta de 215 km/h).
Se asocian a una Blade Battery con química LFP de 82,5 kWh de capacidad en el caso de las variantes Comfort y Design con la que homologan 482 y 456 km de autonomía respectivamente. Por su parte, la variante Excellence cuenta con una de 91,3 kWh con la que anuncia 502 km de autonomía según el ciclo WLTP.
Admiten cargas de 11 kW en corriente alterna y de hasta 150 kW en el caso de batería de menor capacidad. La Excellence AWD alcanza una potencia de carga de hasta 230 kW, por lo que en un viaje puede recargarse del 10% al 80% en 24 minutos.
Comportamiento
Contaba al principio que el Seal U es un modelo donde prima la comodidad. El Sealion 7 tiene una suspensión más firme y se nota desde un primer momento, si bien tampoco hasta el punto de resultar dura y que transmita cualquier imperfección de la cara.
Eso ayuda a que el coche, que es muy potente y gana velocidad muy bien, no balancee en exceso en curva, si bien no me parece un coche deportivo, principalmente porque la dirección es muy poco comunicativa, la posición de conducción muy erguida y el tacto del freno muy artificial.
Es posible variar el nivel de regeneración de energía en dos niveles pero, al menos en carretera y autovía, los entornos donde conduje el coche, no varía demasiado esa retención cuando levantas el pie del acelerador. Además ofrece cuatro modos de conducción: ECO, Normal, Sport –más contundente– y Snow, para una mejor tracción sobre superficies resbaladizas.
Sin ser por chasis o dirección un coche que destaque por agilidad (el peso acaba notándose), tampoco se nota torpe. Su esquema de suspensión de dobles triángulos superpuestos en el eje delantero y eje trasero multibrazo le aporta buena maniobrabilidad y un rodar muy fino. El motor envía más potencia al eje trasero (gracias al sistema de distribución del par inteligente iTAC) y, si bien en la entrada a la curva no vas muy rápido, su entrega de potencia es tal que sales muy rápido de ellas, sin llegar a ser una entrega extrema.
Faltaría por medir consumos, que esta primera prueba de contacto (apenas una mañana) fue escasa para analizar este apartado en profundidad.
Opinión coches.com
Se va poniendo interesante el segmento de los SUV eléctricos dinámicos. Sin haber probado el Macan eléctrico (mucho más caro) este Sealion 7 se coloca entre un Tesla Model Y y un Audi Q6 tanto en el apartado dinámico como en calidades y precio. De hecho, esta versión probada, la Excellence AWD no está lejos en prestaciones del SQ6.
Convence el coche por equipamiento y acabados, estos últimos los esperables en un coche de su precio. A falta de ver los consumos, no diferirán mucho de los que veíamos en la prueba del BYD Seal, lo que nos dejaría en unos 350-400 km antes de cargarlo. Ahí el hecho de que esta versión cargue más rápido (230 kW frente a 150 kW) es algo que convencerá a quien busque algo así para viajar.
Ese aspecto es el que puede decantar la balanza hacia esta variante más prestacional, puede que sea más crucial incluso que el extra de potencia o la tracción total, salvo que se busque un extra de motricidad, ya que claramente no estamos ante un todoterreno.
Los amortiguadores adaptativos hacen que sea un coche estable sin renunciar al confort cuando se pasa por superficies irregulares y el precio, sin ser para todos los públicos, resulta competitivo. Para acabar de convencer, la marca anuncia una garantía del fabricante de 6 años para el vehículo y 8 años para la batería y el motor eléctrico.
- Equipamiento de serie muy destacado
- Mejora de capacidad de carga
- Calidad de rodadura y prestaciones
- Dirección demasiado asistida
- Cuadro de instrumentos algo caótico
- El peso del coche se nota bastante
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