Hace ya 25 años que se lanzó el Sportage, un modelo clave en el salto de Kia, una de las marcas que ha tenido una mayor evolución del panorama automovilístico europeo. En España las cosas este 2018 le van realmente bien. Hasta septiembre han crecido un 25% las matriculaciones de sus vehículos, colocándose como séptima marca en ventas… y tercera en el mercado particular.
El Kia Sportage es esencial para conseguir estas cifras pues supone nada menos que el 26% de los modelos que se venden. Se trata ya de la cuarta generación de este exitoso SUV, lanzada en 2016, que ahora se renueva.
El mercado de los SUV compactos ha cambiado radicalmente respecto al de hace unos años. Mientras que antes unas pocas marcas apostaban por ellos, ahora todas las marcas tienen su representante. Es lógico, ya que ya es el segmento más importante en ventas, superando a los compactos y los utilitarios.
El Sportage sigue siendo uno de los referentes en esta competida categoría. Es el quinto modelo más vendido (realmente cerca del cuarto, el Hyundai Tucson) y en lo que va de año es el segundo preferido por los particulares, solamente por detrás del Peugeot 3008. ¿Podrá mejorar estos excelentes resultados el Kia Sportage 2019? Desde luego, se ha renovado en todos los frentes, como podrás ver a continuación.
Exterior
No ha habido una revolución estética. En realidad esta ya ocurrió hace un par de años, en el salto de la exitosa tercera generación a esta cuarta. Pero sí que se añaden nuevos detalles que hacen que el coche tenga una imagen algo más sofisticada.
Lo más obvio lo encontramos en el frontal. Cambia casi por completo el paragolpes, con un aspecto más deportivo que el anterior, sin ser demasiado agresivo. Ahora los faros antiniebla se alojan de manera diferente en los laterales inferiores y están unidos por una línea cromada.
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También se estiliza la ya clásica parrilla Tiger Nose, que puede tener un marco cromado (como esta unidad que ves en las imágenes) o bien negra mate. Nuevos son también los grupos ópticos LED, que integran el diseño de luces de cuatro puntos que ya conocimos en el Kia ceed 2019. Quizá los intermitentes sean poco visibles, por ponerles alguna pega.
Quizá la vista que menos cambia es la lateral. En ella apenas apreciamos cambios en los diseños de sus llantas de aleación, que pueden ser de 16, 17 o 19 pulgadas (como las opcionales que luce esta unidad, con neumáticos 245/45. El coche puede elegirse en nueve colores de carrocería. Ocho de ellos son metalizados (salvo el blanco más sencillo y económico) y de esa paleta, cinco son colores nuevos (los azules me parece que le sientan especialmente bien).
Ya en la zaga, se mantiene el diseño en el que predominan las líneas horizontales. Han variado algo el diseño de los paragolpes, que ahora integran las luces de marcha atrás y los reflectores y también de las ópticas LED. Los acabados GT-Line cuentan con una salida doble de escape y otros detalles que acentúan su deportividad, como el difusor trasero integrado o los paragolpes que hacen que crezca 10 mm respecto al las versiones convencionales.
Por lo demás, no ha habido cambio de cotas. El coche conserva sus 4.485 mm de longitud, con 1.855 mm de anchura y 1.635 mm de altura, con una distancia entre ejes de 2.670 mm. Tampoco hay cambios en su coeficiente aerodinámico de 0,33 Cx.
Interior
Como comentábamos del modelo previo a esta actualización, se trata de un coche que ofrece un espacio bastante amplio tanto en las plazas delanteras como en las posteriores. En eso no ha cambiado nada, ya que el espacio es el mismo en todas las cotas. Incluso si equipamos el techo solar, como en esta unidad, tu cabeza no sufrirá.
Las mejoras se han centrado en mejorar el aspecto y la calidad percibida del habitáculo. En ella cobra especial importancia la tecnología. Estrena pantalla de 7 pulgadas y una de 8 pulgadas sin marco. Esto ha obligado a modernizar la disposición y forma de las salidas del aire y, de paso se ha aprovechado para sumar un marco cromado al conjunto.
Hay otras novedades, como el volante (que sigue teniendo un gran número de botones, quizá excesivo), y las formas del cuadro de instrumentos que se ve realmente bien e integra una pantalla de información entre los relojes.
Hay nuevos materiales de recubrimiento y, a mi no me gustó el excesivo abuso del negro piano (al menos en nuestro nivel de terminación). Además de cubrir buena parte de la consola central , no me parece una buena idea que esté en los asideros de las puertas, una zona donde, además de ensuciarse mucho, se acabará dañando con facilidad. Tienen una mejor presencia en un primer momento que los plásticos empleados antes (echa un ojo a las fotos de esta prueba)… pero hay que cuidarlo demasiado para que siga luciendo así.
En el apartado práctico, no añade huecos portaobjetos a los ya conocidos… salvo que la unidad disponga, como en nuestro caso, de freno de mano eléctrico, que gana uno al lado de los reposavasos en medio de los asientos delanteros. Guantera y bolsas de las puertas amplias, las plazas traseras permiten que el respaldo se incline (los que tenemos niños que duermen en viajes nos fijamos en esas cosas), salida de aire propia y puerto USB..
Maletero
El maletero de un Kia Sportage se sitúa en la media del segmento, con una capacidad de entre 491 y 503 litros de capacidad, dependiendo de si eliges kit antipinchazos o la rueda de repuesto temporal. En todo caso se trata de un espacio de formas regulares y aprovechables, de 912 mm de largo, por 1.035 de ancho y unos buenos 886 mm de altura.
Ojo, nuestra unidad de pruebas cuenta con motor diésel, que para reducir las emisiones contaminantes precisa de un depósito de Adblue que mengua un poco la capacidad, que pasa a ser de entre 467 y 480 litros. Ojo, que hay una tercera variante, que es contar con el sistema Mild Hybrid, la gran novedad de esta generación, se queda con 439 litros, ya que la baterías restan espacio (e impiden equipar la rueda de repuesto temporal). En este cuadro puedes ver las diferencias:
CINCO PLAZAS | Gasolina | Diésel | Mild Hybrid |
Kit antipinchazos | 503 l | 480 l | 439 l |
Rueda temporal | 491 l | 467 l | – |
El maletero cuenta con sujeciones para fijar la carga y elementos prácticos como ganchos para colgar bolsas. Las versiones de gasolina puede contar con el piso que se coloca a dos niveles y que crea un doble fondo interesante.
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Como es habitual, puede ganarse espacio abatiendo los respaldos de los asientos traseros. La operación hay que realizarla desde el interior, con una palanca ubicada en el lateral del maletero, no puede hacerse desde el propio maletero. La capacidad también varía en función de la mecánica elegida:
DOS PLAZAS | Gasolina | Diésel | Mild Hybrid |
Kit antipinchazos | 1.496 l | 1.492 l | 1.428 l |
Rueda temporal | 1.480 l | 1.456 l | – |
Equipamiento
Nuestra unidad corresponde al acabado Drive, posiblemente, a nuestro juicio, el más recomendable por todo lo que incluye (al precio que lo hace). Tradicionalmente la gama de os modelos Kia siempre se estructuraba igual. Un acabado Concept sencillo (ya no muy básico con el paso de los años), el Drive por encima y luego un Emotion con más elementos, sobre todo de confort. Posteriormente sumaron el GT-Line para dar un toque más deportivo, que tomaban detalles de modelos como el Ceed GT o el Optima GT. Estos equipamientos eran bastate cerrados, sin apenas opciones (y reducidas a las versiones más equipadas).
Ahora la cosa se complica algo más. Cada nivel de acabado cambia ligeramente las cosas que incluye en función de la motorización y el GT-Line se divide en dos: GT-Line Essential y GT-Line Extreme… y la mecánica híbrida tiene el suyo propio (casi idéntico al GT- Line, todo sea dicho). Además, cada nivel de acabado cuenta con sus opcionales, si bien integrados en paquetes.
En la ficha del modelo hemos desglosado los principales elementos de cada uno para hacerte una idea. Puedes configurar este acabado a tu gusto, con todos los extras que necesites y te permita tu presupuesto, en nuestra página de ofertas del Kia Sportage. En ella también encontrarás los mejores precios para el modelo, publicados por concesionarios de la marca de toda España. Te recomendamos también echar un ojo a nuestro comparador de seguros para dar con la póliza que mejor se ajuste a tus necesidades.
Aunque entre muy bien por los ojos el acabado GT-Line, la verdad es que el Drive incluye casi todo lo que uno puede necesitar. En nuestra unidad con motor diésel cuenta con elementos como las llantas de 17 pulgadas, las barras de techo, el spoiler trasero, volante en piel, navegador con pantalla de 7 pulgadas que incluye cámara de asistencia al aparcamiento y es compatible con Apple Carplay y Android Auto…
Presta también especial atención a la seguridad, con numerosos airbags, ESC, VSM + TSA, control de freno en descenso y ayuda al arranque en pendiente y asistentes como el mantenimiento de carril, reconocimiento de señales de tráfico, asistente dinámico de luces de carretera, sistema de detección de fatiga… Por 29.500 €, que, si sumas descuentos (incluida financiación), se queda en 23.590 €, un precio más que competitivo.
Además, nuestra unidad contaba con elementos extra, como el Pack LED (faros de LED), el Pack Vision (el techo panorámico de cristal), el Pack Style (llantas de aleación de 19″, rueda repuesto temporal, frenos delanteros disco 17») y el Pack City (sensores de aparcamiento delanteros, freno de estacionamiento eléctrico).
Motor
La mayoría de novedades se concentra en el apartado mecánico. Para empezar, los motores de gasolina cuentan con filtro de partículas, tanto el de acceso, el 1.6 GDI de 132 CV atmosférico como el 1.6 T-GDI 177 CV.
Si hace apenas tres años este segmento estaba claramente dominado por motorizaciones de gasóleo, ahora a situación ha dado un giro de 180 grados y la marca espera que la gasolina concentre el 60-65% de las ventas, en consonancia con el mercado.
Nuestra unidad de pruebas es el motor diésel 1.6 CRDI. Se trata de un nuevo propulsor que reemplaza al 1.7 l. Denominado de manera interna U3, es más pequeño y ligero incorpora la tecnología activa para el control de emisiones, con un SCR, para reducir los NOx y las partículas.
Entrega 115 CV a 4.000 rpm a las ruedas delanteras mediante un cambio manual de seis relaciones y anuncia un par máximo de 280 Nm entre las 1.500 y 4.500 rpm. Sus prestaciones no son sorprendentes, pero más que suficientes para mover el coche. Alcanza los 175 km/h de velocidad máxima y necesita de 11,8 segundos para completar un sprint de 0 a 100 km/h y prácticamente lo mismo (11,9 segundos) en pasar de 80 a 120 km/h). Su consumo combinado es de 5,1 l/100 km, con unas emisiones de CO2 de 136 g/km con este nivel de equipamiento.
Quizá convenga más apostar por la segunda versión de este motor, que con sus 136 CV y 320 Nm de par (este entre las 2.000 y 2.250 rpm) tiene unas mejores prestaciones, gasta incluso menos… y puede combinarse también con la trasnsmiión automática de siete relaciones y la tracción total.
Por encima, coronando la gama se sitúa el 2.0 Mild Hybrid con 185 CV. Pudimos recorrer con él unos cuántos km, pero esperaremos a conocerlo con mayor profundidad para contarte cómo va. Este sistema de micro hibridación promete mejoras de consumos de un 7% y de un 4% en las emisiones contaminantes. Toma como base el 2.0 CRDI que probamos y se espera que en 2020 este sistema llegue también al 1.6 CRDI como parte de la estrategia ECO de la marca.
Comportamiento
Cuando iba por carreteras alicantinas al volante del nuevo Kia Sportage sorprende lo bien aislado que se encuentra el habitáculo. Percibes el sonido del motor en frío, pero a medida que ganas velocidad va desapareciendo. Ya destacaba antes, pero creo (hace ya un par de años de la prueba del anterior 1.7) que este diésel mejora en ese sentido. Todo sigue dando sensación de solidez,
No es un alarde de potencia, pero su amplio rango de par máximo disponible hace que no se le atraganten demasiadas situaciones a ritmos normales. Porque es un coche sencillo de conducir, agradable y de reacciones predecibles.
Circulando por ciudad y por vías rápidas tiene buena calidad de rodadura. No es tan ágil como, por ejemplo un Seat Ateca a la hora de encarar curvas lentas, pues su eje delantero responde menos rápido a las órdenes del volante y el trasero resulta algo remolón a la hora de ayudar con el balanceo de pesos. Para tratarse de un SUV (tiene 172 mm de altura libre al suelo) no p
Las suspensiones algo secas al pasar por baches… y tampoco ayudan esas grandes llantas de 19 pulgadas, muy incómodas cuando el asfalto no está en perfectas condiciones. Seguramente con las de serie de 17 pulgadas será aún más cómodo.
La dirección de tacto agradable y busca la comodidad de uso más que la precisión en pequeños movimientos de volante. Quizá me moleste más esa suavidad en el tacto del cambio, soy mas de recorridos algo más cortos y ajustados, si bien eso va en gustos y no desentona con la filosofía del coche, desde luego.
Al tratarse de un contacto no medimos los consumos con precisión. El anterior 1.7 consumió en nuestra prueba a fondo 6,7 l/100 km, una cifra muy similar a la que obtuvimos con este motor, pero creo que podrían mejorarse y estar en el entorno de lso 6 si uno se lo propone y no es demasiado alegre con el pie derecho.
Opinion coches.com
Si los SUV te encandilan (no eres el único) y cuentas con un presupuesto limitado, presta atención al nuevo Kia Sportage. Hay opciones más económicas en el mercado, pero pocos te ofrecen tanto por un precio tan ajustado, con buenos remates en un interior (lástima de negro piano) amplio y un coche muy sencillo de llevar, con reacciones muy nobles y cómodo.
¿Elegiríamos este diésel o el gasolina con idéntico nivel de dotación? Pues aquí ya es cuestión de echar cuentas. A favor del gasolina, los 1.235 € de diferencia… pero conocemos de otros modelos de la marca ese motor y peca de falta de par y de consumos algo elevados para su potencia, por lo que el diésel puede ser interesante si haces una buena cantidad de kilómetros al año, aunque tendrás que prestar atención si sueles moverte por ciudad con él, si bien esperamos que las limitaciones a la etiqueta C de la que presume tarden en llegar.
- Mejoras estéticas acertadas
- Buenos ajustes en el interior
- Relación precio/equipamiento (no tan cerrados como antes)
- Detalles en negro piano en lugares poco adecuados
- Reducción del maletero por el depósito de Adblue
- Retrovisores delanteros poco visibles
Galería de fotos: