Skoda Enyaq 80, a prueba: por qué pide a gritos mejor infraestructura de carga

Skoda presume siempre de ser la marca más racional del Grupo Volkswagen. Productos bien hechos, sobre una base técnica que comparte con muchos modelos de otras marca. Hoy vamos a ver si su primer coche nacido como eléctrico, el Skoda Enyaq, es fiel a esa premisas.

El nombre Enyaq viene del irlandés Enya, que significa fuente de vida. Y si escarbas en la etomología celta ves que proviene del término eithne, algo así como esencia o principio. La marca le ha puesto al final la Q que define a la gama SUV. Como el Skoda Kodiaq, el Karoq o el Kamiq.

El Skoda Enyaq tiene un precio de partida de 40.500 euros, sin descuentos ¿Saca, como es habitual en la marca todo el partido a cada euro invertido? Vamos a analizarlo a fondo:

Exterior

Este coche es primo del Volkswagen ID.4 que probaremos en unas semanas y del Q4 e-tron, con el que ya tuvimos un primer contacto. Y del futuro Cupra Tavascan, que por ahora solamente conocemos en su versión conceptual.

No juega tanto a parecer futurista, sino a seguir pareciendo un coche convencional. Y el mejor ejemplo lo vemos en el frontal, donde se simula una parrilla… si bien es ciega debido a que no se precisa refrigeración como con un motor de combustión.

La flanquean unos faros muy bien integrados en el diseño, con LED de serie y matriciales opcionales. La marca asegura que ha tomado elementos de la artesanía checa del cristal para crear los elementos interiores. A España no llega por ahora la parrilla transparente con elementos verticales retroiluminados que vimos en su presentación estática. Algo más abajo tenemos unos parasoles con formas bastante angulosas envolviendo una toma de aire que se apoya sobre un splitter.

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En el lateral vemos sus formas de SUV, o más bien una especie de familiar sobreelevado, algo que realzan los plásticos negros en la parte inferior. Detalles como las barras de techo o los marcos de las ventanillas cromadas, que le dan un aire más refinado. Las llantas, entre 18 y 21 pulgadas. En esta unidad de pruebas tenemos de 20 pulgadas.

Se trata de un coche bastante grande, con 4.649 mm de longitud, de los cuales 2.785 mm corresponden a la distancia entre ejes. Otras cotas son sus 1.616 mm de altura (apenas un centímetro menos que un Karoq, que mide 1.603 mm) y sus 1.879 mm de alto. No destaca por cotas todoterreno, con 15,4 grados ángulo de ataque y 16,7 de salida.

En la zaga tiene el nombre de la marca en medio del portón trasero y el del modelo en un lateral, más pequeño. Las ópticas tienen unas formas angulosas que casan muy bien con el coche y en la parte inferior unas molduras que destacan su aspecto de SUV.

Interior

La familia ID de Volkswagen jugó a ser rompedor en el interior. Hasta el punto que, en la prueba del ID.3, nos parecía que se habían pasado un poco de frenada. El Enyaq tiene un aspecto mucho más convencional. Y a riesgo de que me consideréis viejuno, me convence más.

El motivo es la facilidad de uso. Tenemos un volante con mandos convencionales, con dos radios como el que vimos en nuestra prueba del Octavia Combi. Nada de superficies táctiles y sí pequeñas ruletas y botones físicos bien organizados. Quizá hasta han pecado de conservadores manteniendo el mando satélite para el control de velocidad de crucero, que a mi es algo que me gusta en el volante.

En medio del salpicadero, la pantalla más grande jamás montada en un Skoda. Es de 13 pulgadas (de serie de 10) y tiene buenos gráficos y menús no demasiado complicados. Su mayor pero es que a veces tarda un poco en responder. Es táctil, sí, pero tenemos bajo los aireadores algunos botones para acceder cómodamente a las principales funciones.

Esta pantalla se complementa con un cuadro de instrumentos digital. Tiene un tamaño más modesto, de apenas 5,3 pulgadas. Pero muestra la información básica y tiene cuatro vistas distintas que puedes cambiar desde el volante. Su te parece poco, puedes elegir, como opción, un Head-Up display que te da más datos en el parabrisas.

La posición de conducción es cómoda, algo más elevada que un turismo y tienes mucho espacio. Para conductor, acompañante… y también para dejar objetos. La consola central apenas roba sitio y tenemos desde una zonza de rexcarga inalámbrica, reposabebidas y algún hueco más al lado del minúsculo selector del cambio y botón de estacionamiento eléctrico.

Pero, sin duda, lo mejor es la calidad de realización. No diría que tiene mejores materiales que la familia ID de Volkswagen pero sí que se han elegido mejor. Encontramos zonas tapizadas, desde el salpicadero a puertas o lateral de la consola. Puedes escoger entre cinco ambientes distintos, desde el básico Loft al más refinado Ecosuite.

Detrás también se cuida mucho a los pasajeros. La calidad de los materiales es muy parecida a la que se encuentra delante (salvo la parte superior de las puertas, que es plástico duro). Hay suficiente espacio para las piernas y para la cabeza.

Pero se aprecia que el piso está algo más elevado que en un coche convencional (cosas de llevar las baterías debajo) en dos cosas: Por un lado la posición al sentarte, con las piernas algo más flexionadas de lo habitual. Y por otro el acceso al coche, que es algo más limitado que en un SUV equivalente. Eso sí, ganas un espacio

No faltan detalles que mejoran el confort, como la salida de aireadores al final de la consola, que además permite controlar la temperatura. También un par de tomas USB-C y otra de 220 V. En los respaldos de los asientos delanteros hay revisteros y un espacio más pequeño, ideal para dejar el móvil. Puede contar también con cortinillas en las ventanillas y, por supuesto, con un práctico reposabrazos central.  

Maletero

Una de las bazas tradicionales de Skoda es ofrecer el maletero más grande de su segmento, una filosofía que casa muy bien con el carácter familiar y práctico de sus vehículos. Y en los coches eléctricos, también. El maletero de Enyaq tiene 585 litros de capacidad, más que alternativas como el Volkswagen ID.4 (543), Ford Mustang Match-E (402+100), Kia EV6 (520) o Hyundai Ioniq 5 (531).

Además de una buena cifra, Skoda es especialista en cuidar estos espacios de carga. Contamos con perchas retráctiles para colgar bolsas, ganchos, ganchos para sujetar la carga, una toma de 12V. También alguna solución Simply Clever, como el espacio compartimentado bajo el piso, donde puedes llevar los cables de carga que vienen de serie, un Menekes (Tipo 2) y uno para cargas de emergencia. E incluso un enganche de remolque abatible.

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El espacio de carga tiene más de un metro de profundidad. De todos modos, si precisas llevar objetos largos y estrechos cuentas con una trampilla entre los asientos. Para objetos más voluminosos, hay unos tiradores en los laterales para abatir los respaldos. Queda un espacio casi plano, de 1.710 litros de capacidad.

Equipamiento

Como te contamos, existen cinco ambientes para el Skoda Enyaq, los Loft, Lodge, Lounge, Suite y ecoSuite. Entre ellos varían los materiales de la molduras y tapizados, todos con una gran sensación de calidad. Más tarde llegarán los Skoda Enyaq Sportline iV y el Skoda Enyaq RS iV, variantes con un toque deportivo y su propio nivel de terminación.

De serie todas ellas incluyen ópticas LED, llantas de 19 pulgadas, climatizador bizona, acceso y arranque sin llave, paquete cromado interior, sensores de lluvia y luces, sensores de aparcamiento traseros o los retrovisores plegables.

También sin coste viene la instrumentación digital o el sistema multimedia con pantalla de 13 pulgadas  y Bluetooth, radio DAB, ocho altavoces… No faltan ayudas a la conducción como el control y limitador de velocidad, alerta de cambio de carril, eCall, Front Assist…

Nuestra unidad contaba con algunos opcionales, como el techo solar o el Head-Up Display (este último parte del Pack Infotainment XL, que además tiene el navegador con paquete Media e Internet, por 900 €.

El precio del Skoda Enyaq parte de 40.500 euros, cifra que se eleva a los 46.500 € con el paquete de batería grande. Recuerda que puedes encontrar ofertas del Skoda Enyaq en nuestra sección de coches nuevos, publicadas por concesionarios oficiales del fabricante. Esas cifra que encuentres pueden incluir la financiación del coche con la marca.

Motor

En el lateral trasero derecho está la toma de carga. Tiene un cargador embarcado que admite cargas de hasta 11 kW en corriente continua. Si usas un cargador rápido con corriente continua, que va directamente a la batería, puede cargar hasta 125 kW, que no es demasiado.

Hay dos baterías diferentes a la venta en España La sencilla del Enyaq 60 iV, con 58 kWh de capacidad neta y 400 km de autonomía homologada se asocia a un motor eléctrico de 180 CV de potencia y 310 Nm de par. Por encima está la de este Enyaq 80 iV probado, a nuestro juicio la más interesante para la filosofía del coche. 

En este caso tenemos una batería de 77 kWh netos con los que homologa 534 km de autonomía entre cargas. La potencia del motor asociado crece hasta los 204 CV, que se envía a las ruedas traseras. Ofrece unas prestaciones suficientes, ya que acelera hasta 100 km/h desde parado en 8,5 segundos y alcanza 160 km/h.

Comparte batería con una versión de tracción total, el Enyaq 80x iV, que llega a los 265 CV y con el Enyaq RS iV, el más potente de la gama con 306 CV. Con mejores prestaciones, sí, pero con menor autonomía. En esta tabla te resumimos los datos principales de cada variante:

Comportamiento

Este es un coche muy sencillo de conducir. Y al igual que el Volkswagen ID.3, no precisas ni tocar el botón de arranque en la columna de la dirección. Pones la D y estás listo para conducir. No tiene posición P. Simplemente paras y al abrir la puerta se activa. Más sencillo, imposible.

Tras probar los primos de Volkswagen y Audi, estamos sin duda ante la alternativa más cómoda. Ideal para viajar, por espacio interior y lo bien insonorizado que está el habitáculo. Ya no es que suene el motor. Como todos incorpora un sonido a bajas velocidades pero es inmperceptible. Ayudan a moverse en autovía de manera relajada los asistentes a la conducción, tanto el control de crucero adaptativo como el

A todos estos crossover eléctricos que inundan el mercado les sienta bien esta naturaleza eléctrica en vías de alta capacidad. Gran distancia entre ejes y un peso elevado hacen que devore kilómetros sin inmutarse. La dirección es bastante precisa, si bien poco comunicativa. Tampoco es muy agradable el pedal del freno, que obliga a pisarlo muy a fondo para que actúe y es difícil de dosificar.

Estamos ante un coche pesado, de 2.090 kg. Y aunque 204 CV pueden parecer muchos, la relación peso/potencia es normal y condiciona su agilidad. Porque gana velocidad bien, pero no de manera sorprendente, al menos en carretera. En ciudad es otro cantar, porque la respuesta es más inmediata a velocidades bajas. Y a pesar de su tamaño, al ser un coche de propulsión no se mueve mal en maniobras.

En ciudad o carreteras secundarias pueden ayudar mucho usar las levas tras el volante pues modifican la retención. Van desde el 0 al 3 y este último equivale a la posición B del selector del cambio. No cuenta con conducción one pedal, que detiene el coche incluso sin pisar el freno. También hay un sistema de retención automática. Funciona gracias al radar de proximidad con el vehículo delantero, leyendo las señales de velocidad máxima y en función del trazado si activas el navegador. 

También es posible variar el carácter del coche con los modos de conducción. Se nota bastante el cambio y por ejemplo en el Modo ECO el acelerador responde con mucha parsimonia y la velocidad máxima se limita a 180 km/h. Con la suspensión adaptativa DCC tienes 14 niveles de ajuste de la suspensión.

Si bien cuenta con casi 19 cm de altura libre al suelo, no es un coche demasiado apto para aventurarse fuera del asfalto, al menos con versiones de tracción trasera. Eso sí, ni en el modo más deportivo notarás que es un coche de esta naturaleza, olvídate de redondear curvas.  

Y en cuanto al gasto, te mueves en unos niveles de 21 kWh/100 km en autovía, con cuatro ocupantes y el maletero cargado viajando a ritmos legales y con temperaturas bajas, lo cual no está mal. En ciudad y alrededores hemos conseguido cifras muy parejas a las homologadas, en el entorno de 17,7 kWh a los 100 km.

Opinión coches.com

A nivel estético Skoda ha hecho un buen trabajo en un coche con un tamaño ideal para una familia de cuatro. El Enyaq tiene un interior amplio, con un diseño agradable donde destaca por calidad de materiales y ajustes.

Y sí. Por supuesto se mantiene como referente de practicidad y en capacidad de carga entre los rivales. Y sin ser perfecto, mejora la ergonomía de mandos de sus primos del Grupo. Lástima que la pantalla se haya mostrado algo lenta de reación en ocasiones. Eso sí, se trata de un problema que ha de mejorar en todo el Grupo Volkswagen.

En marcha nos parece agradable y confortable. Y, sobre todo, mucho más manejable de lo que uno piensa al ver sus dimensiones. La autonomía es aceptable. Sin duda la versión de 80 kWh de capacidad es la más aconsejable, pero a la hora de viajar toca ser precavidos porque a ritmos normales te quedas a 300 km a poco que, como nos ocurrió, bajen las temperaturas.  

Y sí, la recomendamos no por prestaciones (muy similares a pesar de la mayor potencia), sino porque es un coche ideal para viajar. Supone pagar 6.000 euros más, hasta los 46.500 euros, pero disfrutarás más de él… en el terreno donde más destaca: carreteras amplias para viajar.

Galería de fotos:

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