smart #3 Brabus 428 CV, a prueba: el SUV coupé más atractivo ¿y deportivo?

A quien recuerde a smart como aquella marca especializada en coches realmente pequeños, de esos que incluso se podían aparcar perpendicularmente, tengo que decirle que en qué tipo de cueva ha estado en los últimos años. Desde que Mercedes la comparte con Geely estamos asistiendo a una electrificación total que comenzó con el smart #1. Aunque la cosa no se queda ahí y ahora querían tener un SUV con ciertos aires de coupé para sumarse a una de las tendencias actuales más extendidas, algo que ha hecho con el smart #3.

Como decíamos, la propiedad de smart cambió en 2019. Daimler y Geely llegaron a un acuerdo para que fuera una joint venture con participación al 50 % por ambas partes. La unión de la tradición alemana y el nuevo capital chino han dado como fruto una nueva gama de modelos que crece en tamaño y que apuesta todo por la electrificación. Se juntan el diseño de Mercedes con tecnología de Geely en un modelo que comparte plataforma por el Volvo EX30 y con el Zeekr X, cuya producción está localizada en la planta de Xian (China).

Exterior

Ya hemos comentado que rompía con todo lo anterior y eso se puede apreciar desde el primer vistazo. Ya no está el lenguaje de diseño presente en los smart de anterior generación, pues se reinventa por completo con esta imagen tan redondeada. Lo cierto es que mantiene esa facetasimpática a través de un frontal que destaca por la firma lumínica.

En el smart #3 los faros están unidos por el centro mediante una barra LED y tiene el nombre de la marca justo por encima en la parte inferior del capó. En la parte baja hay una especie de parrilla, aunque va carenada y solamente entre aire por el borde inferior.

Hay muchas características de diseño que podríamos destacar en este smart #3. Lo primero son las llantas de 19 pulgadas, que pueden ser hasta 20 pulgadas en las variantes más altas de gama. El logotipo de la marca gana presencia al estar situado en la aleta delantera, mientras que todos los bajos van cubiertos por plástico negro para conseguir el efecto crossover. Es bastante distintivo que tenga los tiradores de las puertas enrasados en la carrocería, pero es un aspecto que le va a hacer mejorar a nivel aerodinámico (tiene un coeficiente de 0,27 Cx) y ganar eficiencia.

La zaga comienza a definirse desde ese pilar C con forma llamativa y una inclinación mayor que en el smart #1. Este ejemplar quiere ganarse ese título de SUV con ciertos aires de coupé y lo consigue con esa trasera más fluida y con la caída de techo. Aunque lo cierto es que en la zona del portón es muy similar a lo que habíamos visto.

Cuenta con los pilotos traseros LED unidos por el centro, que tienen formas similares a los delanteros y que también hacen girar cabezas a su paso. En ambos tienen una animación al abrir y cerrar el coche. La parte inferior queda reservada para una especie de difusor que apoya su carácter deportivo.

El smart #3 es un SUV eléctrico que podemos colocar en el segmento compacto. Tiene una longitud de 4.440 mm, una anchura de 1.844 mm y una altura de 1.556 mm; mientras que su distancia entre ejes se va a los 2.785 mm. Eso supone ser unos 13 cm más largo que el smart #1 del que deriva, aunque también aumenta ligeramente su batalla. Por dimensiones lo podríamos comparar con otros ejemplares que están en el segmento C-SUV con ese corte coupé. Es idéntico en longitud que el Volvo EC40 y un poco más pequeño que el Mercedes EQA.

Interior

El habitáculo del smart #3 es muy similar al del #1, integrando sus mismas novedades. Eso también quiere decir que nos recuerda irremediablemente al de algunos Mercedes, con una marcada consola central, salidas de aire de estilo turbina y mucha tecnología a nuestro alcance. El protagonismo recae en la pantalla táctil central de 12,8 pulgadas que está en el centro del salpicadero. Es la más grande de su segmento, pues saca varias pulgadas a los Mercedes EQA y Volvo EC40 con los que le estamos comparando, aunque también hay algunos “peros”.

Aglutina muchas funciones, incluyendo la climatización, algo que siempre recalcamos que no termina de gustarnos. Pero también hay que añadir que cuenta con un avanzado asistente por voz que toma la forma de un guepardo y ayuda en muchos aspectos.

La instrumentación digital de 9,2 pulgadas es muy panorámica, bastante más estrecha y alargada que en otros ejemplares, pero muy fácil de visualizar. Se puede completar con un Head-up Display de 10 pulgadas que ayuda a no desviar demasiado la atención de la carretera.

En esta marca los interiores siempre se han caracterizado por tener su propia esencia, por distinguirse de otros. Aunque no hay tanta diferenciación en el “3”, no hay dudas de que la calidad es muy buena. Nos ha sorprendido gratamente por los materiales empleados en la mayoría de zonas.

También por detalles como las salidas de aireación metálicas, a juego con las del volante o el cuero de la tapicería en varios tonos. Por no hablar de una completa iluminación ambiental que incluso llega hasta las plazas traseras, te lo cuento desde ahí.

Atrás quedaron los tiempos en los que entrar a la segunda fila de asientos de un smart era peor que un dolor de muelas. Lo cierto es que el acceso es bastante cómodo y una vez dentro se puede apreciar un buen espacio para las piernas y uno correcto para la cabeza. A pesar de la caída del techo, no hay agobios e incluso se compensa con más hueco para las piernas, para tallas medias no habrá ningún tipo de problema. Si bien es cierto que no tiene el desplazamiento longitudinal de la banqueta y que la anchura es algo justa, cinco personas viajarán apretadas.

Maletero

El maletero del smart #3 ofrece 370 litros de capacidad y se sitúa en lo que consideraríamos la media del segmento. No llega a los 413 litros del Volvo, que sería el referente, pero aún así gana al Mercedes EQA. Es una cifra que no varía por la banqueta como en el #1, pero es aprovechable y cuenta con soluciones para fijar la carga.

También con un hueco bajo el piso que permite llevar los cables de carga separados del resto. Cuando se abaten los asientos en dos partes, queda un espacio de hasta 1.160 litros de capacidad. Habría que sumar a este maletero los 15 litros adicionales que suma el frunk o maletero delantero, que nos servirían apenas para una bolsa o mochila pequeña.

Motor

La gama mecánica del smart #3 está compuesta por dos versiones bien diferenciadas. La de acceso es la que cuenta con un sólo motor eléctrico en el eje trasero con nada menos que 272 CV de potencia y 343 Nm de par. El modelo de propulsión puede llevar una batería de acceso de LFP con 49 kWh que ofrece una autonomía de 325 kilómetros. También se puede optar por la de litio-níquel-cobalto-manganeso de 66 kWh para alcanzar los 455 kilómetros, siendo esa la opción más interesante para los que quieran realizar viajes con este SUV eléctrico. 

Sin embargo, también había que sumar a la gama una variante más capaz que porta el apellido Brabus y que incluso puede presumir de cierta deportividad. Gracias a sumar un segundo motor delantero consigue la tracción total, además de una potencia de 428 CV y 543 Nm de par. Presume de una aceleración de 0 a 100 km/h en 3,7 segundos y solamente puede quedar ligado a la batería de mayor tamaño. Con sus 66 kWh brutos, que son 62 kWh netos, homologa una autonomía de 415 kilómetros.

Comportamiento

Nos ponemos al volante del smart #3 Brabus 428 CV, que es la variante tope de gama. Lo cierto es que el básico ya nos parece más que suficiente para el día a día, pues es capaz de completar el 0 a 100 km/h en 5,8 segundos. Por lo tanto, pensamos que este Brabus no solo irá sobrado para la mayoría de usos, sino que podría llegar a rozar la ridiculez. Siempre en el buen sentido de la palabra, en el que se refiere a un nivel de prestaciones demasiado elevado para el uso urbano que se le presupone a este modelo eléctrico.

Sus aceleraciones son totalmente adictivas, sobre todo en el modo más deportivo, en el que conseguimos hacer el 0 a 100 km/h en 3,7 segundos. Hay bastantes superdeportivos más lentos. Eso no quiere decir que termine de emocionar, pues el sonido simulado del que presume nos ha parecido demasiado artificial. Es un mix de emociones algo difícil de gestionar. Es deportivo por prestaciones, pero no lo es por sensaciones. Es lo mismo que ocurre con otros eléctricos de nueva hornada que son realmente eficaces, pero que no terminan de emocionar.

En este ejemplar hay varios modos de conducción para ajustar su comportamiento. Permite cambiar entre ECO, Comfort y Sport; variando principalmente el tacto del acelerador debido a la entrega de potencia. No es lo único que se puede modificar, ya que también aparece el e-Pedal para cambiar el nivel de retención en tres niveles.

En este sentido, se echan de menos unas levas para hacerlo de una forma más personalizada. Estamos en un primer contacto y no podemos hablar mucho de sus consumos, aunque vemos que es fácil estar algo por debajo de los 20 kWh/100km y de esa forma se superarán los 300 kilómetros reales de autonomía. Nos sigue pareciendo difícil alcanzar los 415 kilómetros que promete la homologación, más aún con ese adictivo empuje del pedal derecho.

En cuanto a la recarga del smart #3, el de acceso ofrece velocidades de hasta 130 kW en corriente continua, mientras que el de la batería de mayor tamaño puede llegar hasta los 150 kW. En ese caso se puede llegar al 80 % en unos 30 minutos. También queda la opción de la corriente alterna, que en la batería pequeña se queda en 7,4 kW, pero que puede llegar a unos interesantes 22 kW para el de batería grande, por lo que lo tendríamos cargado en casa en menos de tres horas.

Llegamos a la conclusión de que es más deportivo que el #1 sin renunciar a la eficiencia. A nivel de chasis, notamos una puesta a punto más dinámica que en su hermano. Gracias a detalles como la mayor distancia entre ejes, la altura rebajada o los neumáticos ligeramente más anchos, el #3 pisa con mayor aplomo en vías rápidas. Además, la suspensión también tiene un tarado un poco más firme, lo que va a ayudar en carreteras de curvas. En general, el comportamiento de este SUV eléctrico es bastante satisfactorio y el picante del Brabus puede llegar a ser muy aprovechable.

Opinión coches.com

Toca finalizar nuestro primer contacto con el smart #3 felicitando a la marca por su 25 aniversario. Dudamos que lo terminen llamando “hashtag three” o “hashtag tres” como dice la marca, pero de lo que no hay dudas es de que se trata de un modelo realmente interesante. Los puntos fuertes de este vehículo sería ese interior por su nivel de calidad y de equipamiento, el comportamiento también nos ha convencido y se suma a que los consumos están bastante controlados. Incluso tenemos que hablar bien del precio de partida de 38.190 euros con descuentos.

Nos solemos quejar de las elevadas tarifas de los nuevos eléctricos, sobre todo de estos que lanzan las marcas de corte premium. Sin embargo, el smart #3 ha sabido encontrar el equilibrio y parte por debajo de los 40.000 euros. De esta forma, queda muy alejado de los Volvo EC40 y Mercedes EQA con los que le hemos comparado. De hecho, es más de 10.000 euros más barato que el sueco y casi 17.000 euros más asequible que su primo alemán. Por no hablar de que en coches.com hay ofertas interesantes para este coche, además de su financiación o de la posibilidad de tenerlo de renting.

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