Puede que haya quien eche de menos en la gama del actual Skoda Superb una variante de tintes deportivos, una suerte de RS a imagen y semejanza del Skoda Octavia RS. No llegará, pero sí el Skoda Superb Sportline que le aporta una estética más deportiva sin que la berlina grande pierda la elegancia tan característica a lo largo de su historia. Este acabado supone un sobreprecio de 4.500 euros respecto del acabado de entrada Selection.
Comparte elementos que hemos visto en otros modelos de la marca con esta terminación, como el marco de la parrilla específico en negro, a juego con los marcos de las ventanillas y retrovisores exteriores. No faltan molduras o un faldón delantero específicos y el logo en negro en la zaga, como el alerón del portón trasero y en el difusor trasero. Los cristales traseros están oscurecidos y las ventanillas laterales tienen cristal laminado para reducir el ruido que llega al habitáculo.
Si eliges la carrocería familiar, el Skoda Superb Combi, las barras de techo van también en ese color. Está calzado con unas llantas de aleación de 18 pulgadas Vela en tono antracita (son opcionales las Torcular negras de 19 pulgadas o las aerodinámicas Aniara plateadas del mismo tamaño con embellecedores Aero en negro mate).
En el interior del Skoda Superb Sportline hay dos opciones dentro de las Design Selections de la marca:
- Suedia Sport: asientos con ajuste eléctrico, tapizadas con Suedia y cuero sintético.
- Suite Sport: asientos certificados por AGR, con función memoria, ventilación y masaje con diez cojines de aire controlados neumáticamente, tapizado en piel perforada y cuero sintético. Se paga como extra, obviamente.
Ambos ambientes comparten asientos delanteros deportivos con reposacabezas integrados y calefactados, el techo en color negro, molduras con efecto carbono, pedales de acero inoxidable, volante deportivo con costuras negras y gráficos específicos para el Virtual Cockpit (el cuadro de instrumentos digital, de 10 pulgadas).
En Europa puede elegirse con toda la gama mecánica: motor de gasolina TSI de 150 o 265 CV, diésel TDI de 150 y 193 CV o el híbrido enchufable iV de 204 CV. Suma el chasis deportivo que rebaja la altura libre al suelo en 15 mm y la dirección progresiva. El sistema DCC Sport requiere un pago aparte.
Ubicado en el medio de la gama (sin ser tan lujoso como el L&K), cuenta con faros Matrix LED y luces traseras LED con intermitentes dinámicos o el Kessy Advanced, que estrena función de bloqueo y desbloqueo automático y suma iluminación en los tiradores exteriores. No falta el volante deportivo multifunción de tres radios con costuras negras, iluminación ambiental o la pantalla de infoentretenimiento de 13 pulgadas de serie.
Fuente: Skoda
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