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Mario Nogales

DS 4 1.6 PureTech 180 CV, prueba con el agraciado compacto francés

Creo que todos recordamos el primer DS 4. Se trataba de un modelo todavía con los chevrones de Citroën y sin grandes diferencias respecto al C4 más allá de su elevado precio. Tuvo un restyling para afinar un poco algunos detalles y sacar una versión Crossback, aunque nunca terminó de encajar. Pero ahora llega la segunda generación del DS 4 para cambiar de paradigma completamente y hacerse hueco en el segmento C premium con un precio de partida de 31.600 euros

Como decíamos, es un modelo que apunta a la parte alta del segmento compacto. Busca plantar cara a rivales de la talla del Audi A3, BMW Serie 1 o Mercedes Clase A; pero con un aspecto más crossover y generosas opciones de personalización. De hecho, se produce en la planta de Russelheim en Alemania, siendo el segundo DS que nace fuera de Francia tras el DS 9 que viene de China. Hay mucha esperanza puesta en este producto, pues la marca cree que se llevará alrededor del 40 % del total de sus ventas.

Exterior

Si hay un aspecto que hace destacar a los modelos de DS, ese es el diseño. Es completamente distinto a todo lo demás que vemos en el mercado, puede presumir de una personalidad muy marcada y capta miradas a su paso. Para el DS 4 se inspiraron en el prototipo DS Aero Sport Lounge, aunque con algunas modificaciones.

En el frontal llaman la atención principalmente dos aspectos. El primero es su gran parrilla con entramado de diamante, remarcada por unas molduras cromadas, y el segundo son sus destacadas ópticas con tecnología DS Matrix  LED Vision. Emplean 98 diodos de LED y tienen una luz diurna en posición vertical muy reconocible. 

El DS 4 también está cargado de detalles de diseño que hacen que tenga un estilo superior a otros rivales. Hablamos de la insignia sobre el capó o del logo de la marca en el pilar C. No pasan desapercibidas las llantas de 19 pulgadas, los tiradores de las puertas cromados y enrasados con la carrocería o la robustez que aporta el acabado Cross.

En esta versión vemos barras de techo en negro, plásticos del mismo color recubriendo todos los bajos de la carrocería y defensas plateadas en ambos extremos del coche. Este ejemplar tiene aspecto de crossover por sus formas, que son afiladas y llenas de aristas.

Se nota también en su parte trasera, que cuenta con un pilar C muy llamativo con el logo de la marca y tiene un spoiler de techo por encima de la luneta de pequeñas dimensiones. Aunque lo más llamativo son los pilotos traseros LED unidos por una barra cromada y con una firma lumínica bien reconocible gracias a las escamas grabadas con láser. En la parte inferior se mantiene el esquema con un paragolpes de plástico, una defensa plateada y unas salidas de escape cromadas que son simuladas.

Hay cambio de plataforma y eso se traduce en unas dimensiones mayores. De hecho, está por encima de la media en este sentido gracias a una longitud de 4.400 mm, una anchura de 1.830 mm y una altura de 1.470 mm. La sensación es que estaría a medio camino entre un hatchback de cinco puertas tradicional y un SUV compacto, sobre todo cuando se opta por la versión Cross. Por otro lado, la distancia entre ejes se va hasta los 2.675 mm en este modelo.

Interior

En el exterior del DS 4 veíamos como se buscaba la distinción, algo que también se repite en el interior. Tiene un diseño muy reconocible, con el rombo como patrón principal y con detalles inéditos. Llama la atención los aireadores DS Air que quedan parcialmente escondidos, la posición del botón del freno de mano o la cargada consola central. Incluso los marcos de las puertas son distintos. En este sentido, cuesta un poco encontrar el tirador para abrirlas, al estar en una posición baja, y también se dificulta el acceso a los elevalunas, que están muy altos. 

Ya dijimos desde el principio que el DS 4 apuntaba al segmento premium y el camino para hacer eso es mejorar la calidad. Lo cierto es que este habitáculo ofrece una atmósfera bastante distinguida gracias a sus buenos ajustes y al uso de materiales agradables al tacto. Cambian entre las distintas versiones, pero podemos ver algunos como elcuero, el Alcántara o la madera. Hay que destacar los asientos por su comodidad y también por poder tener reglajes eléctricos, memoria, calefacción e incluso varios programas de masaje. 

A nivel tecnológico, el DS 4 también integra novedades suculentas. Cuenta con el sistema multimedia DS Iris System, que se opera a través de una pantalla táctil central de 10 pulgadas. Es rápida y bastante intuitiva, además de poder contar con nuevas funciones. Porque en la consola central aparece la pantalla DS Smart Touch de 5 pulgadas que sirve para programar accesos directos a través de gestos como el zoom o directamente la escritura. El sistema es compatible con Android Auto y Apple CarPlay de forma inalámbrica, además de poder recibir actualizaciones remotas.

Pero la cosa no queda ahí si hablamos de la tecnología del DS 4. Hay una tercera pantalla que corresponde a la instrumentación digital, que es un poco más simple, pero permite ver distintas informaciones, así como imágenes de la visión nocturna DS Night Vision. Terminaríamos esta parte con el espectacular Head-Up que tiene tecnología de realidad aumentada y que nos ayuda al proyectar información sobre el parabrisas en una superficie que equivaldría a 21 pulgadas.

Era imposible quejarse del espacio en las plazas delanteras debido a la comodidad de los asientos y al estar desahogados en todas las direcciones. Sin embargo, la segunda fila de asientos del DS 4 es algo más justa y será recomendable para cuatro pasajeros. No hay que malinterpretar, está en la media del segmento con una distancia libre para las piernas y una un poco más reducida para las cabezas. Donde peca es en la anchura, debido a una plaza central carente de forma y surcada por un prominente túnel de transmisión.

Maletero

El maletero del DS 4 es otro de los puntos donde se aprecia una mejoría evidente. Está por encima de la media gracias a una capacidad de 430litros, aunque hay que tener en cuenta que en la versión híbrida enchufable se reduce hasta los 390 litros. También tenemos el portón trasero eléctrico para facilitarnos la vida y unas proporciones regulares que lo hacen bastante aprovechable.

Bajo el piso también hay un hueco, aunque en esta versión no encontramos rueda de repuesto, sino un soporte para algunas herramientas y para el kit antipinchazos. Por otro lado, si necesitamos todo el volumen de este maletero basta con abatir los asientos traseros en dos partes (60:40), lo que nos dejaría una superficie plana y una capacidad total de hasta 1.240 litros.

Equipamiento

El DS 4 se puede personalizar de forma muy generosa, pues se ofrece en tres versiones bien diferenciadas y cada una tiene sus propios acabados. El precio está algo por encima de la media, pero por suerte hay bastantes ofertas del DS 4. Están disponibles en nuestra sección de coches nuevos, junto a otras herramientas como la financiación con buenas condiciones.

En la versión convencional, por ejemplo, arranca con el Bastille+, que es el más básico, pero cuenta con detalles como las llantas de 17 pulgadas, lunas tintadas o sensor de aparcamiento trasero. Con el Trocadero ya se obtienen llantas de 19 pulgadas, el DS Iris System con DS Smart Touch y navegación conectada 3D, DS Extended HUD, sensores de aparcamiento delanteros y traseros o cámara de visión trasera. El Rivoli sería el tope de gama al sumar faros DS Matrix LED Vision, DS Drive Assist y un aspecto diferenciado.

Los clientes también pueden optar por la versión Performance Line para sacar su deportividad. Trae llantas de 19 pulgadas en negro, lunas traseras tintadas, alfombrillas delanteras y traseras específicas o pedales y reposapiés de aluminio. En el Performance Line+ aparecen elementos del Rivoli como los faros DS Matrix LED Vision, el sistema DS Iris System con DS Smart Touch y navegación conectada 3D, además del Extended Safety Pack con reconocimiento extendido de señales, Active Safety Break hasta 140 km/h y control de crucero adaptativo Stop&Go.

En el caso de querer explotar su imagen de todocamino, se puede configurar con la versión Cross, que es precisamente la que probamos. Hay un Cross Trocadero con llantas de 19 pulgadas, DS Iris System con DS Smart Touch y navegación conectada 3D y acceso manos libres Proximity. También un Cross Rivoli más completo con DS Matrix LED Vision, DS Drive Assist con pack detector de tráfico trasero y cristales laterales laminados, acústicos y sobretintados.

Motor

Se asienta sobre la plataforma EMP2 de Stellantis, lo que se traduce en la incorporación de mecánicas electrificadas a su gama. Aparece en la parte más alta de la gama la versión híbrida enchufable E-Tense, que lleva la etiqueta CERO de la DGT y desarrolla nada menos que 225 CV. Han prometido que para 2024 solo harán eléctricos, pero de momento este modelo también ofrece varias versiones de combustión tradicional, permitiendo elegir al comprador entre dos motores de gasolina y un diésel.

El acceso a la gama lo pone el motor de tres cilindros 1.2 PureTech de gasolina con sus 130 CV. Por encima está el cuatro cilindros 1.6 PureTech de 180 CV, que es precisamente el que lleva nuestra unidad de pruebas. Por otro lado, el diésel sigue presente mediante el BlueHDi de 130 CV. Curiosamente, todas las versiones del DS 4 van ligadas a una transmisión automática de ocho velocidades EAT8, no hay opción a cambio manual en este modelo.

Comportamiento

Ya estamos al volante del DS 4 PureTech de180 CV y 250 Nm de par, la que sería la versión de gasolina más elevada y ocupa un lugar intermedio en la gama. Digamos que sería el motor a elegir si no buscamos la etiqueta CERO y si queremos unas prestaciones que estén a la altura. Va bastante sobrado para el día a día y permite hacer viajes con garantías gracias a una aceleración de 0 a 100 km/h en 8 segundos y a una velocidad máxima de 230 km/h. Destaca el refinamiento de la mecánica de gasolina de cuatro cilindros, que va a ser mucho mejor que en la versión de acceso de tres cilindros. 

Hay que recordar que todos los DS 4 son automáticos y tienen tracción delantera. La caja de cambios de convertidor de par y ocho velocidades es la opción ideal para esta mecánica. Destaca por la notable suavidad que consigue al cambiar de marcha, haciendo las transiciones casi imperceptibles. Si hubiera que sacarle alguna pega, sería que a veces resulta algo lenta, no tiene la precisión de otras transmisiones que vemos en sus rivales. Bueno y también que se elimine por completo la opción a elegir cambio manual, algo que podría jugar en su contra de cara a algunos compradores.

El comportamiento del DS 4 puede ser modificado mediante cuatro modos de conducción seleccionables a través de un botón en la consola central. Son los Eco, Comfort, Normal y Sport; que modifican algunos aspectos como la respuesta del acelerador, el tarado de la dirección o el tacto del cambio. No es nada radical, pero algo ayudan en el día a día. En todo caso, durante la semana de pruebas el DS 4 ha entregado consumos bastante razonables y nos estamos moviendo en torno a los 7 litros, no demasiado alejado de las cifras homologadas (6,6 l/100km en ciclo WLTP).

Cuando probé el Peugeot 308 ya dije que me gustaba mucho la puesta a punto del chasis. En este caso ya hemos visto que el DS 4 utiliza la misma base técnica y eso es una buena noticia. Gracias a la nueva plataforma se trata de un coche más ligero y eficiente, al tiempo que gana en rigidez estructural. Se queda en unos nada despreciables 1.420 kg y presume de un comportamiento muy equilibrado. Su objetivo es más el de ofrecer sensaciones confortables más que deportivas como vemos a través de algunos detalles.

De hecho, tiene un aspecto diferencial que lo cambia todo. Porque monta la suspensión DS Active Scan Suspension que, sin duda, es lo más destacado del DS 4. Este sistema se vale de la cámara situada en la parte superior del parabrisas para ir escaneando el terreno y leyendo las irregularidades en la carretera. Esos datos se unen a los de cuatro sensores de balance y tres acelerómetros y en cuestión de milisegundos se modifica el tarado de la suspensión de forma independiente entre las cuatro ruedas. 

Eso se traduce en un confort excepcional que probablemente sea su valor más destacado. El DS 4 es un coche perfecto para hacer un viaje largo con total comodidad, porque en autopista también nos ha gustado mucho su aplomo. Además, no desentona en otros ámbitos como la ciudad o las carreteras secundarias. Hay opciones mucho más dinámicas, eso está claro, pero este ejemplar busca otra cosa. Lo único que no termina de convencer es el tacto de la dirección. Independientemente del modo seleccionado, tiene una respuesta muy filtrada y poco comunicativa. 

Opinión coches.com

El DS 4 es un compacto francés, sí, pero también tienen genes alemanes y quiere batirse con rivales alemanes. Con esa combinación en su ADN, vemos un producto muy completo y que convence desde el primer momento. El diseño es muy diferente, tanto por fuera como por dentro, eso junto a la elevada calidad de materiales vienen de la parte francesa. Aunque también encontramos una construcción sólida y una parte dinámica que saca su parte alemana. 

El precio está algo por encima de la media en este compacto que apunta al segmento premium. Son 31.600 euros de base, pero un ejemplar con una mecánica y un equipamiento más altos de gama está en 43.600 euros. En el caso de querer optar por el híbrido enchufable la factura se encarecería aún más, aunque precisamente para ahorrar en la compra de un vehículo está coches.com, proveedor de movilidad que tiene las mejores ofertas del país.

DS 4 1.6 PureTech 180 CV
7.8Nota
Lo mejor
  • Mucha personalidad en su diseño
  • Calidad y equipamiento completo
  • Confort en marcha elevado
Lo peor
  • Espacio interior justo
  • Sin cambio manual
  • Precio por encima de la media
Diseño9
Habitabilidad7.5
Acabados8
Maletero7.5
Equipamiento8
Motor7.5
Comportamiento7.5
Calidad Precio7

Galería de fotos:

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