El Skoda Octavia es todo un estandarte dentro del segmento de las berlinas. Se trata de un modelo clave en la historia de la marca checa que se ha sabido adaptar a los tiempos que corren para seguir manteniendo una posición destacada en el mercado. Con la nueva generación ha abrazado la electrificación y también ha adoptado tecnologías pioneras. Y ahora quiere completar su gama de equipamiento con el Skoda Octavia Sportline, un acabado de corte deportivo que no deja a nadie indiferente.
En la gama Octavia queda situado entre el Style y el RS, que es el tope de gama. Aporta una estética más dinámica al modelo y también sistemas que mejorarán su comportamiento. El interior también recibirá elementos específicos para diferenciarse del resto y aportar el toque deportivo correspondiente. El acabado Sportline está disponible tanto con la carrocería sedán como con la familiar Combi y con una extensa lista de mecánicas a elegir.
Lo primero que caracteriza al Skoda Octavia Sportline por fuera son los detalles en negro. En este color van el splitter delantero, el marco de la parrilla, el alerón trasero la inscripción de la marca en el portón o el propio difusor posterior. De serie incluye las llantas de 17 pulgadas Pulsar en negro pulido, aunque opcionalmente se pueden escoger las de 18 pulgadas Vega en negro metálico o las de 19 pulgadas Taurus en negro pulido. En algunos puntos de la carrocería recibe las insignias Sportline.
El interior de este modelo se basa en el acabado Style, aunque suma algunos detalles como el acabado textil para el panel de instrumentos o las tiras decorativas en Negro Piano. Cuenta con los asientos deportivos con reposacabezas integrados y tapicería ThermoFlux, así como con el volante deportivo multifunción con el logotipo Sportline o los umbrales decorativos en las puertas. Como el resto de Octavia, mantiene las soluciones Simply Clever, incluyendo algunas tan llamativas como el puerto USB-C integrado en el retrovisor.
El Skoda Octavia Sportline se puede escoger con todos los motores disponibles en la gama de este modelo, que no son pocos. En diésel está presente el 2.0 TDI con tres niveles de potencia: 115, 150 y 200 CV; teniendo algunos de ellos opción a cambio automático DSG y a tracción total. Por la parte de la gasolina aparece el 1.5 TSI de 150 CV con opción a tener la transmisión automática y también tecnología Mild Hybrid o el 2.0 TSI de 190 CV con DSG y tracción total de serie. Hay una variante de GNC, el G-TEC de 130 CV, y un híbrido enchufable, el Octavia iV Sportline con una potencia combinada de 204 CV.
En este acabado Sporline se ofrece opcionalmente el Control de Chasis Dinámico para mejorar su comportamiento dinámico, que permitirá al usuario elegir entre hasta quince configuraciones en función de sus necesidades. Otros extras relacionados con la seguridad son el Crew Protect Assist con función antivuelco, el asistente de prevención de colisiones, el asistente de giro o el nuevo airbag central entre los asientos delanteros.
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