Jeep Grand Cherokee, a prueba: ¿resiste la comparativa con SUV premium europeos?

Los SUV están de moda. Tienen sus pros y contras y estas últimas se resuelven con tecnología. Mayores frenos, amortiguadores, más potencia… eso es lo que consiguen los SUV premium, a costa de aumentar el precio. Las carrocerías empezaron a llamar la atención de los fabricantes de lujo porque vieron una enorme oportunidad de negocio.

El Jeep Grand Cherokee fue el que abrió la veda en 1992, como vimos en la historia del modelo. Y poco a poco llegaron otras propuestas. En 1997, el Mercedes ML, que es el actual Mercedes GLE. En 1999 llegó el BMW X5, que la marca catalogó como SAV (Sport Activity Vehicle). Otro rival europeo podría ser el Range Rover Sport, pero hoy en día el actual Land Rover Defender lo vemos como un rival más directo.

¿Puede con esos rivales? Coches que tienen, todos ellos, versiones híbridas enchufables como este Jeep Grand Cherokee 4xe.  De partida, el Grand Cherokee cuesta 83.250 € en el momento de escribir este artículo. Un dineral, pero menos que el Defender híbrido enchufable, que va mucho menos equipado. El Mercedes (con mayor batería) y el BMW (mucho más capaz) se van más lejos. Y sí, la unidad que probamos de acabado Summit Reserve cuesta 100.250 euros. Una barbaridad para la mayoría… pero de nuevo menos que sus rivales si igualas los equipamientos.

Si quieres ese coche con estándares de gigante americano, pero a un precio algo más reducido, no dejes de visitar coches.com. En nuestra sección de coches nuevos puedes encontrar ofertas de Jeep Gran Cherokee, publicadas por concesionarios oficiales de la marca, que rebajan esa cantidad. Contamos también con herramientas que te ayudan a financiar el coche si deseas pagarlo más cómodamente mes a mes. Pero antes, conozcamos a fondo al Jeep Grand Cherokee:

Exterior

No vamos a extendernos en el diseño, lo puedes ver tú mismo. Se identifica enseguida como un Jeep por los siete listones de la parrilla delantera pero a pesar de esos detalles clásicos, ves sin duda que estás ante un modelo nuevo de verdad. Esta parte frontal inspirada, nos dice la marca, se inspiró en la cabeza de un tiburón. Dobles faros delanteros, gran toma de aire inferior son otras características.

Es un diseño sólido, elegante con detalles en este acabado superior Summit como las llantas de 21 pulgadas (con neumáticos 275/45). Se ha bajado la línea de cintura respecto a la generación anterior, con más superficie acristalada para ganar luminosidad y visibilidad desde el interior. No faltan cromados en este acabado, la denominación del modelo y nos ha gustado mucho el pilar C en forma de cuña

Es un coche grande, de 4.914 mm de longitud, de los que casi tres metros (2.964 mm) corresponden a la distancia entre ejes. Otras cotas son los 1.968 mm de ancho o los 1.795 mm de altura. Puedes pensar que se vende poco debido a esas dimensiones, pero un BMW X5 o un Mercedes GLE son más largos. Solamente el Land Rover Defender es notablemente más corto.

En un vehiculo polivalente son de vital importancia las cotas offroad. Las mejores, sin duda, son las del Defender, pero un Jeep Grand Cherokee no se queda tan atrás, salvo en el ángulo ventral y el de salida, se notan sus mayores dimensiones. Tienen tracción total y van muy bien por caminos, pero los SUV premium alemanes no están tan preparados para superar obstáculos.

Interesante también aquí el coeficiente aerodinámico. Se ve enorme, con una superficie frontal de casi tres metros cuadrados (2,95 m2) pero tiene un mejor Cx que el Defender. Resulta alucinante la cifra que anuncia el Mercedes, de 0,29 Cx.

Interior

El interior recuerda al del Compass, pero el ambiente, sin duda, es el de un coche premium. Lo ves en este acabado Summit tope de gama, con materiales nobles como el cuero del salpicadero, asientos y puertas incluso hasta en las bolsas inferiores. Hay metal de verdad para el selector del cambio. Nos ha gustado la madera de nogal que encuentras en volante, salpicadero y puertas y la alcantara en techo y pilares. Afea bastante el conjunto el negro piano de la consola central, en mi opinión.

Los ajustes no están mal, pero creemos que los europeos están un paso por delante todavía en este sentido y tienen mayores posibilidades de personalización

No falta tecnología. Desde la instrumentación digital, con una pantalla de 10,25 pulgadas que tiene distintas opciones de visualización a la central, que no es muy grande para el estándar actual, pero es más que suficiente y el sistema UConnect resulta muy fluido. Además tenemos un montón de botones físicos, tanto el climatizador como otros en la parte superior e inferior, que resultan útiles.

¿La sorpresa? La pantalla de 10,1 pulgadas, en frente del copiloto, para que pueda ver contenidos, incluso vídeos… y no, no se puede ver desde el asiento del conductor.

Detrás, amplitud más que sobrada, incluso para tres o para un adulto entre dos sillas infantiles y un túnel central muy poco intrusivo. Buenos acabados también, climatización independiente, asientos calefactados y ventilados, tomas USB, cortinillas en las ventanas. De todo.

Punto negativo, el Grand Cherokee 4xe no está disponible en Europa con versión de siete plazas. En Estados Unidos sí se existe el Grand Cherokee L, con tres filas de asientos y más modularidad. Tampoco sus rivales cuando lo eliges con mecánica híbrida enchufable, pero sí puedes elegir un Mercedes GLE, un BMW X5 o un Land Rover Defender 130 con más asientos, siempre asociados al motor de combustión mild hybrid.

Además, sus gamas son más completas en carrocerías, ya que si quieres un aire más deportivo ahí están los GLE Coupé o BMW X6 y, en el caso del Defender, una carrocería más corta, el Defender 90… y una más larga, el Defender 130 con hasta 8 plazas.

Maletero

El maletero anuncia 533 litros de capacidad. Sin ser una mala cifra, no es demasiado para tratarse de un vehículo cercano a los cinco metros de largo.

Claramente le penaliza el sistema de propulsión híbrido. Pero ojo, mucho menos que a sus rivales de tamaño similar. Solamente el BMW X5 alcanza los 500 litros.

Obviamente puedes abatir los respaldos de los asientos traseros para ganar capacidad, logrando un espacio de 1.160 litros hasta la altura de las ventanillas. Está bien rematado y tenemos una alfombrilla reversible para poder llevar enseres húmedos sin manchar el coche.

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Bajo el piso, espacio para los cables de conexión y una rueda de repuesto de serie… que no tienen sus rivales. Pegas del sistema híbrido y algo a tener muy en cuenta si sales mucho del asfalto.

Motor

Bajo el capó encontramos el sistema híbrido. Contamos con un motor de gasolina de cuatro cilindros en línea, turboalimentado que entrega 272 CV. No está solo, le acompañan dos motores eléctricos:

• Uno de 136 CV, que mueve las ruedas, integrado en la caja de cambios ZF de ocho velocidades por convertidor de par.
• Otro de 45 CV, que sirve como generador de electricidad y solamente contribuye al empuje mecánico a bajas revoluciones.

Resultado: 381 CV de potencia total y 637 Nm de par. Es, junto al Mercedes GLE 400e, el menos potente de los modelos con lo que lo estamos comparando, donde destaca el BMW X5 xDrive50e.

Todos montan motores de cuatro cilindros, el más potente, también el de BMW con 313 CV, que también tiene el propulsor eléctrico más capaz. Eso sí, el Jeep Grand Cherokee es el único que tiene un segundo motor eléctrico.

No se trata de una potencia escasa, ya que, si miramos el peso, se trata del más ligero de entre sus competidores. De acuerdo, 2.434 kg no son pocos, pero sólo él y el BMW están por debajo de las 2 toneladas y media.

Tercer elemento del sistema, la batería, de 17,3 kWh de capacidad y que está en posición central trasera. Puedes cargarla desde la toma que conexión que se ubica sobre el paso de rueda delantero, hasta a 7,2 kWh de capacidad. La autonomía en modo eléctrico que homologa es de 48 km, suficiente para tener la etiqueta Cero.

En este punto de electrificación está por detrás de sus rivales. Tanto en batería, donde como es habitual Mercedes monta una gigantesca, lo que explica en parte su alto peso y los más de 100 km de autonomía que homologa. Le supera el BMW X5 pero… no admite cargas rápidas. Tampoco el Jeep pero sí el Defender (50 kW) y el Mercedes (60 kW).

Comportamiento

Mejor ver cómo va conduciendo. ¿Te das cuenta en el Jeep Grand Cherokee que llevas un coche alto, voluminoso y pesado? Sí. Del mismo modo que lo noté en la prueba del Defender. Eso sí, el salto respecto a su predecesor, que probamos, es abismal. Es más cómodo que antes, está mejor insonorizado y con buenas prestaciones.

Es capaz de acelerar de 0 a 100 km/h en 6,3 segundos, que está muy bien. Lo que pasa es que se enfrenta a unos auténticos monstruos. El X5 híbrido lo hace en apenas 4,98 segundos.

Tampoco es un coche en el que busques esas prestaciones, sino sensación de control. En carretera echamos de menos, comparado con sus rivales alemanes, una dirección algo más precisa y una suspensión más refinada. Se nota también bastante el viento lateral.

Puedes cambiar un poco su comportamiento. El modo Auto va a buscar el mejor ajuste posible y el Sport endurece dirección y suspensión, al tiempo que hace que el motor/transmisión sea más vivo. Y eso eleva el consumo, ya no por el modo en sí, sino porque recarga la batería para poder ofrecer toda la potencia disponible.

El Grand Cherokee 4xe gastó en nuestro recorrido para medir consumos, 9,7 l/100 km, partiendo con la batería totalmente descargada. Alto, pero me parece una cifra escandalosa ya que con el anterior diésel V6 3.0 nos quedamos en 8,6 l/100 km. Aquel coche pesaba casi lo mismo, siendo más pequeño y no tenía esa batería con la que pudimos recorrer, en ciudad, 40 km, que no está mal.

Puedes usar el botón Max Regen para aumentar la retención y generar más energía cuando sueltas el acelerador. Y por supuesto, cuenta con los modos de gestión energética habituales de los híbridos: Hybrid, Electric (para priorizar el motor eléctrico) o eSave para mantener el nivel de carga o aumentarla.

Hasta aquí el uso normal. Pero ojo, que fuera del asfalto es un coche al que cuesta encontrar sus límites. Tenemos modos de conducción específicos para circular entre rocas (Rock), nieve (Snow) o arena y barro (Mud&Sand). Pero hay más.

Tenemos, para empezar, la tracción total Quadra-Drive II de serie, con diferencial trasero bloqueable. Así puede empujar sin problema aunque una rueda patine. También reductora con una increíble desmultiplicación de 2,752:1 para la caja de cambios. Y suspensión neumática, con cinco niveles para alcanzar los 275 mm de distancia al suelo y 61 cm de vadeo o superar las más duras trampas offroad. ¿Quieres más? La versión Trailhawk, suma neumáticos específicos para todoterreno desconexión de la barra estabilizadora delantera.

Opinión coches.com

Este coche es un auténtico SUV. Amplio, versátil y sobresaliente fuera del asfalto, sin llegar a ser el Wrangler Rubicon, claro. En esta quinta generación es más europea en el sentido de que gana lujo, equipamiento y se comporta mejor en carretera: bien insonorizado en autovía y en zonas de curvas lentas la suspensión neumática controla bastante bien los balanceos de la carrocería.

Corre, ojo, ahí has de tener cuidado con los frenos. Pero si eso es lo que buscas, quizá el Mercedes y, sobre todo el BMW X5 te sacarán más sonrisas… y tienen una gama mecánica más amplia, no sólo sistemas de propulsión híbridos enchufables, del que dudaba pero es convincente si precisas la etiqueta Cero en un coche de este tamaño.

No alcanza ese equilibrio tan conseguido del Defender de ir bien en asfalto y en condiciones extremas fuera de él, pero se le acerca y llega casi a los mismos sitios, con un estilo 100% americano. En realidad, cualquiera es buena alternativa… si puedes pagarla, claro.

De partida, el Grand Cherokee cuesta 83.250 € en el momento de escribir este artículo. Un dineral, pero menos que el Defender híbrido enchufable, que va mucho menos equipado. El Mercedes (con mayor batería) y el BMW (mucho más capaz) se van más lejos. Y sí, la unidad que probamos de acabado Summit Reserve cuesta 100.250 euros. Una barbaridad para la mayoría pero de nuevo menos que sus rivales si igualas los equipamientos.

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