Corría el año 1999 cuando se vio por primera vez el Hyundai Santa Fe en el Salón de Detroit. Un nombre americano (tomado de la ciudad del estado de Nuevo Mexico) para un producto, un SUV grande, que hasta entonces no existía en la marca y que sería clave en su evolución a lo largo del siglo XXI que estaba a punto de comenzar
Apenas un año después se lanzaba a la venta el modelo de producción. Era el primer todocamino de la marca, que ahora cuenta con numerosos ejemplos con diversos sistemas de propulsión, desde el Kona al eléctrico Ioniq 5, pasando por el superventas Tucson. Hasta entonces solamente había fabricado el Hyundai Galloper de 1991 a 2003 en Ulsan (Corea), que en realidad era un Mitsubishi Montero de segunda generación.
El primer SUV desarrollado íntegramente por la marca en su historia comenzó a venderse en 2001 en Europa. Eso convierte al Hyundai Santa Fe en el vehículo más longevo del fabricante en el viejo continente, con cinco generaciones a sus espaldas.
Antes de empezar a desglosarlas todas, una curiosidad: Santa Fe tiene su propio logo, con el nombre del modelo y un sol. Es el momento de echar un vistazo atrás para descubrir cómo ha evolucionado este modelo en diseño, seguridad y tecnología, en las que se han vendido millones de unidades en todo el mundo.
Hyundai Santa Fe (SM). 2000-2006
Hyundai presentó el Santa Fe al público europeo por primera vez en el Salón de Ginebra de 2000. Sus puntos fuertes eran funcionalidad y fiabilidad. Venía de debutar en Estados Unidos con un éxito abrumador, donde gustaron sus protecciones musculosas o el capó abultado. Al otro lado del charco se ofrecía con dos motores de gasolina, un 2.0 de 136 CV de cuatro cilindros con transmisión manual y tracción delantera y un V6 de 2.7 litros con 179 CV, asociado al cambio automático y a la tracción total permantente (el par se dividía en proporción 40:60 entre los ejes delantero y trasero).
Con 4.505 mm de longitud, era más largo y ancho que sus competidores, con un habitáculo más amplio y un maletero destacable, con una luneta practicable. Destacar su nivel de seguridad ya que en las valoraciones del NHTSA superó a muchos de sus rivales directos del segmento (entonces el Honda CR-V, Jeep Cherokee o Toyota RAV4).
La gama de motores se completó con un 2.4 gasolina y un bloque imprescndible para triunfar en Europa, un 2.0 diésel de 116 CV con el que aceleraba de 0 a 100 km/h en 13,3 segundos y alcanzaba 172 km/h. Poco después sumaría un sistema de tracción a las cuatro ruedas controlado por ordenador.
Además, el coche no escatimaba en cuidados a los pasajeros. El equipamiento incluía aire acondicionado, reproductor de CD, así como elevalunas eléctricos, espejos y techo solar, era realmente completo para la época.
Hyundai Santa Fe (CM). 2006-2012
La segunda generación se presentó en el Salón de Detroit en enero de 2006. La firma automovilística no escatimó en esfuerzos para su desarrollo, invirtiendo dos años de trabajo y 150 millones de euros en mejoras. Diseñado en California, adquirió una apariencia más elegante de líneas suaves, que disimulaban su mayor tamaño (4.675 mm de largo).
Esa mayor longitud (y anchura), permitió completar al coche con una tercera fila de asientos, de uso ocasional o para niños. Mejoraron además mucho los materiales interiores, con una sensación de calidad mayor acentuada por los botones y mandos retroiluminados en azul o la tapicería de cuero de las versiones más equipadas, que podían contar con navegador integrado, cámara de visión posterior o control de crucero. Tuvo una buena puesta al día, que afectó a todos los apartados, el Santa Fe 2011.
Hyundai Santa Fe (DM) 2013-2017
La llegada de la tercera generación en 2013 supuso un salto muy importante respecto a la segunda. El cambio fue considerablemente más acusado que el que hubo entre las dos primeras generaciones.
A nivel visual ya se trataba de un SUV moderno, con un estilo que en pleno 2022 ha envejecido bien. La parrilla ya tiene un tamaño considerable y estrena forma hexagonal, tanto los faros como los antiniebla crecen, la línea de cintura está muy marcada y el conjunto se sienta bastante atlético incluso a pesar de sus dimensiones.
Se decidió desdoblar la gama en dos carrocerías distintas, la estándar de cinco plazas y la Grand Santa Fe, que se estrenaría un año después del lanzamiento, con siete asientos y una distancia entre ejes 100 milímetros mayor.
Experimentó una mejora sensible en sus acabados y se hizo especial énfasis en los avances tecnológicos (sobre todo en los asistentes de conducción). Su oferta mecánica siguió limitada a tres motores, aunque en esta ocasión eran dos diésel (150 y 200 CV) y solo un gasolina (193 CV).
A la variante de cinco plazas se sumó la versión larga, el Hyundai Grand Santa Fe 2013. Además de siete asientos (su longitud crecía 215 mm, de los que 100 eran de distancia entre ejes), tenía un diseño diferenciado con una parrilla hexagonal, pilar B distinto, llantas específicas…
De moverlo se encargaban un 2.4 GDI de 193 CV de gasolina, con tracción delantera o total y dos bloques diésel de cuatro cilindros, el 2.0 VGT de 150 CV y el 2.2 VGT de 200 CV este último exclusivo de la versión de siete plazas.
Destacable la apuesta por la conectividad, con una pantalla táctil multifunción de ocho pulgadas con navegador opcional, reconocimiento de voz y conexión con el móvil. También con la seguridad, con ABS que incluía asistencia en el frenado o distribución electrónica de la fuerza de frenado (EBD). En estos puntos se mejoró mucho con la actualización, el Hyundai Santa Fe 2016.
Hyundai Santa Fe (TM). 2018-2023
El Hyundai Santa Fe 2018 fue la cuarta generación del Santa Fe. Renovó su aspecto exterior para hacerse más sofisticad, estrenando la rejilla en cascada y conservando las líneas laterales desde las ópticas delanteras a las traseras. Sin perder su esencia de coche práctico y espacioso (se ganaron 38 mm para las piernas en la fila trasera).
En España se ofrecía con dos motores diésel, el 2.0 CRDi con 150 CV, con tracción delantera y cambio manual y el 2.2 CRDi de 200 CV, también con la tracción total y cambio automático de ocho velocidades. En gasolina contaba con el nuevo 2.4 GDI de 185 CV, ligado a la caja automática de seis velocidades y al sistema de tracción total HTRAC, que envía par motor en función del agarre de las ruedas y la velocidad del vehículo en situaciones adversas.
En 2021 se puso al día con una apuesta decidida por la electrificación. Los más tradicionales contaban con un motor diésel 2.2 CRDi con 202 CV y 440 Nm de par, con variantes de tracción delantera y total (como la que probamos). Pero también una versión híbrida de 230 CV y una híbrida enchufable con 265 CV de potencia y 58 km de autonomía en modo 100% eléctrico.
Más allá del apartado motriz, el SUV grande de siete plazas mejoró mucho en el apartado de acabados (buscando subir un poco de nivel) y de innovación tecnológica, con la llegada de pantallas en el habitáculo, combinada con una serie de botones analógicos que facilitan el uso de funciones durante la marcha.
Hyundai Santa Fe (MX5). 2024
El Santa Fe 2024 es la generación que llega a Europa con una versión híbrida de 180 CV con etiqueta ECO y un híbrido enchufable de 160 CV con la etiqueta 0 emisiones. Resultó al presentarlo su diseño, muy novedoso y arrioesgado, con formas muy cuadradas. Delante integró las ópticas con parte de la parrilla y detrás los pilotos van en una posición bastante baja.
Creció un poco respecto de la anterior generación (4,78 metros) y en el interior, de nuevo, evolucionó mucho en términos de diseño y calidad. Llegó la doble pantalla para el cuadro de instrumentos digital y para el sistema de infoentretenimiento, ambas de 12,3 pulgadas y estrenó una consola central muy inclinada, con una zona inferior de almacenaje entre las plazas delanteras.