El Audi A4 es un auténtico coloso del mundo del motor. La berlina salió al mercado en 1994 y lleva más de 7,5 millones de unidades vendidas a nivel global. Con cinco generaciones a sus espaldas, esta semana probamos la actualización de la última, un modelo mucho más maduro y completo. Se ha renovado con algunos cambios estéticos, de equipamiento y también con una gama mecánica más adaptada a los tiempos que corren. Parte de 45.570 euros en nuestro país y vamos a contarte todos los detalles.
Sí, estamos probando una berlina y encima con motor diésel, lo que podría ser el anti-coche según las tendencias actuales. Vemos que la mayoría de ventas se centran en las carrocerías SUV y que el diésel ha sido demonizado, haciendo que sea ya casi residual. Sin embargo, éste coche es la prueba fehaciente de que hay que olvidar los prejuicios y probar un coche antes de juzgarlo. De hecho, en una semana se ha ganado un puesto en nuestros corazones por muchos motivos, como te vamos a contar a continuación.
Exterior
A nivel estético, lo cierto es que el Audi A4 no es el modelo más atrevido del mercado. Lleva el ADN presente en todos los modelos de los cuatro aros, con algunos retoques propios de la actualización, pero sin que haya revolución en su imagen. Comenzamos por un frontal que introduce una parrilla Singleframe de mayores dimensiones y con cierto rediseño. Lo mismo ocurre con los faros que están a ambos laterales, que pueden tener tecnología Matrix LED y estrenan una firma lumínica reconocible. Los paragolpes cambian ligeramente y se apuesta por la horizontalidad.
En nuestra unidad de pruebas se nota el extra de deportividad gracias a que equipa el paquete S line. Eso se traduce en algunos detalles específicos como el entramado de panal de la parrilla, las molduras cromadas o las llantas de 18 pulgadas. Sin embargo, este ejemplar tiene algún extra adicional y vemos llantas de mayor tamaño y también un paquete que incluía los retrovisores y un spoiler trasero en fibra de carbono. Lo cierto es que no le pega demasiado a una berlina diésel, pero habrá usuarios que quieran este tipo de diferenciación.
En la vista trasera del Audi A4 se pueden apreciar esas líneas características de una berlina, con los tres volúmenes bien marcados. Llaman la atención detalles como que los tiradores de las puertas se abren hacia arriba y no hacia un lateral como estamos acostumbrados. En la zaga se mantiene la horizontalidad mediante unos pilotos LED surcados por una pieza cromada y ese alerón que mencionamos anteriormente. El paragolpes se ensancha e incluye unas salidas de escape cromadas que son falsas propias del acabado S line.
Las medidas de este ejemplar apenas han cambiado y sigue siendo una de las berlinas medias de referencia entre los premium. Va en línea con sus rivales al dejarnos una longitud de 4.762 mm, una anchura de 1.847 mm, una altura de 1.428 mm y una distancia entre ejes de 2.820 mm.
Modelo | Longitud | Anchura | Altura |
Audi A4 | 4.762 mm | 1.847 mm | 1.428 mm |
BMW Serie 3 | 4.709 mm | 1.827 mm | 1.435 mm |
Mercedes Clase C | 4.751 mm | 1.820 mm | 1.438 mm |
Volvo S60 | 4.761 mm | 1.850 mm | 1.437 mm |
Interior
En el interior del Audi A4 también vemos algunos cambios que son interesantes. El principal es que cuenta con un nuevo sistema multimedia MMI Touch con el sistema operativo MIB 3. Eso se traduce en una mayor rapidez de respuesta de su pantalla central de 10,1 pulgadas. Sigue sin convencer que no esté demasiado bien integrada, pero es indudable que los menús son muy claros e intuitivos. No puede faltar un control por voz que no está mal o la conectividad completa gracias a Android Auto y a Apple CarPlay, de forma inalámbrica en el último caso.
Echamos de menos el mando giratorio de la consola central que nos ayudaba a navegar, pues ahora solamente se pueden realizar las funciones de forma táctil. Por suerte, este modelo mantiene controles analógicos para la climatización, que además tienen un tacto muy bueno, con esos clics característicos de Audi.
Hay más botones para funciones relacionadas con la conducción, aunque también se mantiene la digitalización con el Virtual Cockpit que debutó en este modelo en 2016. La instrumentación de 12,3 pulgadas se controla desde el volante multifunción y destaca la cantidad de información en distintas vistas.
Sin lugar a dudas, Audi siempre ha sido reconocida por la calidad que confiere a los interiores de sus coches. Aunque también hemos criticado ciertas cosas en los últimos años, en el A4 la verdad es que queda a muy buen nivel por realización de sus acabados y calidad de sus materiales. Está todo bien ensamblado y no aparecen grillos ni ruidos incómodos. Destacan para bien la tapicería mixta con cuero y Alcántara, un material que se extiende incluso a las puertas. El volante también es de cuero perforado y tiene las costuras en contraste, algo que también se repite en otras zonas.
En general podemos decir que es un habitáculo agradable por esa calidad, aunque siga apareciendo Piano Black en la consola central y plásticos más duros en las partes bajas. Por otro lado, el confort está a la altura con asientos que pueden tener reglajes eléctricos para que sea fácil encontrar la posición ideal de conducción. Además, las plazas delanteras son amplias y confortables. En esta zona también encontramos huecos portaobjetos útiles, como es el caso de los de las puertas, la guantera o los que hay en la consola central y bajo el reposabrazos.
En la segunda fila de asientos del Audi A4 también encontramos sorpresas gratas. Vale que no es tan cómodo el acceso como al de un SUV al estar más cerca del suelo, pero sus plazas son bastante confortables. En las laterales hay mucho espacio para las piernas y uno suficiente para las cabezas. Peca en anchura con una plaza central carente de forma y con túnel de transmisión en la que es mejor utilizar el reposabrazos que sale del asiento.
Maletero
El maletero del Audi A4 está en la media del segmento con sus 460 litros. Queda algo por detrás de rivales directos como el BMW Serie 3 con sus 480 litros, pero es una capacidad notable y muy aprovechable. Sobre todo por unas líneas rectas que hacen que sea fácil repartir la carga. Eso sí, como en la mayoría de berlinas, tenemos un portón que hace que la boca de carga sea más pequeña que en los SUV y su puerta completa, costará llegar hasta el fondo del maletero. Sin embargo, queda a una altura no demasiado elevada.
Otras bondades que vemos en esta superficie es la iluminación y los ganchos para fijar la carga. Bajo el piso del maletero de este A4 hay un doble fondo con hueco para objetos pequeños. Cabría una rueda de repuesto, pero ese espacio está ocupado por la batería auxiliar del sistema Mild Hybrid. A pesar de ser berlina, sí que se pueden abatir los asientos traseros para dejar una superficie plana ni más espacio.
Modelo | Maletero |
BMW Serie 3 | 480 litros |
Audi A4 | 460 litros |
Mercedes Clase C | 455 litros |
Volvo S60 | 427 litros |
Motor
La gama mecánica es de lo que más cambia con la actualización y nos deja con un Audi A4 realmente completo, con opciones de casi todo tipo. Echamos en falta variantes híbridas enchufables que sí están presentes en otros rivales, pero por suerte casi toda la gama recibe la etiqueta ECO gracias al sistema Mild Hybrid de 12 o de 48 V. Si comenzamos por la gasolina, con el 2.0 TFSI de cuatro cilindros están las versiones 35 TFSI de 150 CV, 40 TFSI de 190 CV y 45 TFSI de 245 CV.
Y sorprende ver la importancia que tiene el diésel en el Audi A4. A pesar de ser un combustible que ha ido a la baja en cuanto a demanda, tenemos al 2.0 TDI de cuatro cilindros presente en muchas versiones. Está en el 30 TDI de 136 CV, en el 35 TDI de 163 CV y en el 40 TDI de 190 CV. Por no hablar de que la versión deportiva S4 monta el 3.0 TDI de seis cilindros con 347 CV. La gasolina queda reservada para el tope de gama RS 4, solamente disponible en el Avant, con el 3.0 TFSI de 450 CV.
Comportamiento
Aunque no lo hemos dicho anteriormente, el Audi A4 que probamos es la versión diésel intermedia. El 35 TDI esconde bajo el capó un cuatro cilindros turbo de 2.0 litros, que en este caso entrega 163 CV y 380 Nm de par. Va ligado a la transmisión automática S tronic, que es de doble embrague y siete velocidades. En este caso también hay que decir que es un tracción delantera y que utiliza la microhibridación ligera para conseguir la etiqueta ECO de la DGT y para ser ligeramente más eficiente.
Este Audi A4 equipa un sistema eléctrico de 12 V con una batería adicional que va en el maletero. Consiste en que un motor eléctrico unido al cigüeñal por una correa hace las veces de motor de arranque y alternador. En la práctica, se pueden generar hasta 5 kW extra de apoyo en fases de aceleración. También un uso extendido del Start&Stop, la función avance por inercia y un ahorro de combustible ejemplar. Durante la semana de pruebas hemos rondado los 6litros haciendo todo tipo de recorridos, aunque podría bajar ligeramente con una conducción eficiente.
También es interesante ver el funcionamiento de este motor diésel. En primer lugar decir que es bastante refinado para su tipología y características, deja un buen sabor de boca en ese sentido. Tampoco defrauda en su desempeño, pues los 163 CV de potencia se antojan una cantidad más que suficiente para este Audi A4 y, además, los 380 Nm de par están disponibles entre las 1.500 y las 2.750 rpm. En ese régimen, que es el más aprovechable en los diésel, tiene una respuesta bastante instantánea, con recuperaciones efectivas y generosas para realizar adelantamientos e incorporaciones.
Si hablamos de prestaciones, este Audi A4 35 TDI no es un superdotado, pero tampoco será el último de la clase. Con el diésel intermedio, el sedán acelera de 0 a 100 km/h en 8,2 segundos y consigue una velocidad máxima de 210 km/h. Mención aparte merece la transmisión automática S tronic que monta nuestra unidad. Al ser de doble embrague se asegura una rapidez ejemplar al hacer las transiciones entre marcha, al tiempo que es bastante suave e inteligente. Suele rodar en la marcha que necesitamos en cada momento.
De todos modos, para cambiar ese aspecto, siempre podemos jugar con los modos de conducción del Audi Drive Select. Nos permite cambiar entre Efficiency, Comfort, Auto, Dynamic e Individual; modificando algunos parámetros como la reactividad del acelerador, la dureza de la dirección o la respuesta del propio cambio. No podemos esperar un cambio radical en su carácter, pero sí que nos ayudan y se adaptan al día a día. En todo caso, nos ha parecido que la puesta a punto del chasis del Audi A4 es exquisita, muy acertada para prácticamente cualquier aspecto del día a día.
El comportamiento probablemente sea lo que más enamora de este sedán, que ofrece una calidad de rodadura y un confort en marcha a la altura de muy pocos. Se trata del aliado perfecto para hacer viajes largos con comodidad y bajos consumos. Aunque este tipo carrocería no se lleve tanto actualmente, es mucho más equilibrada que la de los SUV. Es más eficiente a nivel aerodinámico, reduce los balanceos en gran medida y, además, consigue que su peso no se eleve demasiado y quede en 1.485 kg. De hecho, lo notamos incluso ágil en carreteras secundarias. En resumen, un equilibrio envidiable.
Opinión coches.com
¿Puede ser una berlina diésel el coche ideal? Pues a pesar de todos los prejuicios actuales yo creo que sí y el Audi A4 es el perfecto ejemplo para demostrarlo. Aunque no siga las tendencias actuales, estamos ante un coche que cumple en prácticamente todos los aspectos, pues tiene una imagen actualizada, una tecnología completa, bastante espacio interior y un comportamiento exquisito. También hay algunas cosas que no nos han gustado como la integración de la pantalla, que pueda ser demasiado descafeinado en sensaciones o muy caro con los extras
Porque aunque el Audi A4 parte de 45.750 euros, lo cierto es que si lo equipamos generosamente, como es el caso de la unidad que probamos, la tarifa sube. En este caso estamos más cerca de los 60.000 euros debido a la configuración tan llamativa que tenemos. Y esa cifra siempre podría seguir subiendo, ya que la lista de opcionales es muy extensa. Aunque tenga un precio por encima de la media, también se puede ahorrar en su compra visitando coches.com, donde tenemos las mejores ofertas de vehículo nuevo del país, renting y financiación.
Modelo | Precio |
BMW Serie 3 | 44.400 euros |
Audi A4 | 45.750 euros |
Mercedes Clase C | 47.753 euros |
Volvo S60 | 49.550 euros |
- Acabados y calidad interior
- Motor diésel equilibrado y ahorrador
- Calidad de rodadura notable
- Integración de la pantalla
- Demasiado neutro en sensaciones
- Precio final con extras
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