En 2020, Bugatti presentó un prototipo experimental llamado Bolide. Se trataba de un proyecto para investigar qué tan rápido el corazón mecánico de 16 cilindros de la marca podría impulsar un vehículo desprovisto de los lujos del Chiron y con un diseño aerodinámico que le confieren el aspecto de una nave espacial terrestre (o un batmóvil). Ahora, la firma con sede en Molsheim ha confirmado que el Bugatti Bolide entrará en producción en 40 unidades limitadas.
Tras los asientos se encuentra el conocido bloque W16 de 8.0 litros turboalimentado por partida cuádruple, salvo que en esta ocasión se exprimido como nunca antes. Empleando combustible de competición de 110 octanos, es capaz de generar 1.850 CV y 1.850 Nm, significativamente más que cualquier otro modelo de la firma francesa. Además, el hecho de que el Bolide apenas marque una masa de 1.450 kilos gracias al uso extensivo de la fibra de carbono y aleaciones de titanio, lo hace tan increíble como absurdamente rápido.
Para el modelo de producción, Bugatti optó por gasolina de 98 RON que está disponible en todo el mundo, para que los propietarios puedan utilizar sus caras monturas globalmente sin ningún problema. La potencia de salida disponible del vehículo es de 1.600 CV, con una cifra de par de 1.600 Nm a partir de 2.250 rpm. Los ingenieros de Bugatti afinaron el prototipo para aumentar las revoluciones por minuto para su uso en circuito, junto con el sistema de admisión y escape para lograr una capacidad de respuesta aún más rápida y extrema.
De hecho, Bugatti afirma que el Bolide podría completar una vuelta al circuito de Nürburgring en cinco minutos y 23 segundos. Eso lo colocaría cerca del récord actual, sostenido por Porsche con el 919 Hybrid Evo (5: 19,546). Por supuesto, Bugatti basa su número en simulaciones, ya que el Bolide aún no se ha probado en el “Infierno Verde”. Pero sí sabemos que podría hacer el 0 a 100 km/h en 2,17 segundos, el 0 a 200 km/h en 4,36 segundos, el 0 a 300 km/h en 7,37 segundos y el 0 a 400 km/h, rozando los 500 km/h en 20,16 segundos.
Para conseguir también un rendimiento ejemplar a la hora de detenerse, cuenta con unos discos carbocerámicos que van mordidos por pinzas de seis pistones que pesan solamente 2,4 kg cada una. También hay que mencionar un juego de llantas carenadas de magnesio, que pesan 7,4 kg en el eje delantero y 8,4 kg en el trasero. Para garantizar la máxima seguridad y el suficiente confort durante la pura experiencia de conducción, Bugatti está gestando el Bolide de acuerdo con los estándares internacionales de seguridad de la FIA.
Cuando el Bugatti Bolide llegue a sus dueños, probablemente se convierta en el hiperdeportivo más rápido jamás comercializado. Porque con las cifras que marca, supera tanto al Aston Martin Valkyrie AMR Pro como al Mercedes-AMG One y el Lamborghini Essenza SCV12. Con ese nivel de potencia y el reducido peso se consiguen 0,90 kg/CV de relación entre peso y potencia, una cifra que le permite alcanzar un rendimiento similar al de un de Fórmula 1. Las primeras entregas comenzarán en 2024 a razón de cuatro millones de euros la unidad.
“Para mí, poder convertir el experimento mental radical del Bolide en realidad como un vehículo de producción es un sueño hecho realidad, ya que es, con mucho, el proyecto más desafiante de mis 17 años de carrera en Bugatti”, explica Achim Anscheidt, director de diseño de la marca. “Estamos orgullosos de haber logrado mantener el coche de producción tan cerca del prototipo, tanto visual como técnicamente, al mismo tiempo que hemos mejorado el diseño, la calidad y la seguridad del vehículo”, dice Stephan Winkelmann, CEO de Bugatti.
Fuente: Bugatti
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